Seguimos creciendo en familia. Sabemos que llegar a más de dos millones de estudiantes no hubiera sido posible sin nuestra comunidad, conformada por nuestro staff de profesores, mentores, nuestro team y por ti.
Por eso, hoy queremos celebrar este logro recordando aquellos momentos divertidos y emocionantes que pasamos juntos. Así que le pedimos a Tati, Nahum, Lucila, Mr. Lemonade y Marita, cinco miembros de nuestra comunidad, que nos cuenten una anécdota relacionada a Crehana.
Estas son sus historias.
1. "Cuando me contactaron para ser Crehana Star, casi lloro"
Tati Salvador
Pintora, ilustradora, muralista, maestra y Crehana Star.
Aunque llevo varios años trabajando como ilustradora y pinto desde que tengo uso de razón, creo que es necesario seguir aprendiendo. Aprender es maravilloso y me encanta. Ver cómo trabajan otras profesionales, sus consejos, sus métodos, es alucinante tener todo eso en Crehana. Con solo un clic, puedo aprender de lxs mejores y de lxs artistas que admiro mucho.
¿El reto más grande? ¡¡Creo que fue aprender a dosificar!! Porque quiero hacerlo todo y aprenderlo todo. Entre la escuela, mi trabajo como ilustradora y los estudios apenas tengo tiempo, y estaba loca por ponerme a hacer cursos. Así que decidí hacerlo poco a poco, disfrutando e interiorizando cada curso, eso es lo bueno de hacerse Premium.
Recuerdo cuando hace unos meses Romina se contactó conmigo para ser Crehana Star, casi lloro. Me sorprendió y me hizo mucha ilusión, no me lo esperaba para nada, la verdad. Más que una anécdota es una sensación, me siento muy querida y apoyada. Gracias.
2. "Ese momento cuando escuché que mi trabajo estaba ayudando a otras personas, se llamó felicidad"
Nahum Trinidad Venancio
Frontend Developer en el equipo Tech de Crehana
Ya somos 2 millones, ¡wow!, es algo increíble. De hecho, no pensé que llegaríamos en poco tiempo a tantos estudiantes, porque cuando ingresé a trabajar como desarrollador front-end, yo era el integrante número 11 de familia Crehana y el estudiante número 156206. Pero sí, sí está pasando, ya somos 2 millones de estudiantes.
Me siento muy contento, ya que desde el área de Tech he sido parte del equipo que trabajó y continúa remando en la evolución de la plataforma. No ha sido fácil ningún proceso, como el adoptar metodologías de trabajo y realizar cambios constantes con el objetivo de entregar secciones amigables en la página. Pero siempre hubo personas dispuestas a entregarlo todo, comenzando por Diego y Fico. Y ahora vemos el resultado.
Recuerdo que un día estaba realizando algunas compras en un centro comercial y llevaba puesto mi polo negro con las letras blancas de Crehana, cuando la persona que me atendía me preguntó si trabajaba en Crehana, a lo que respondí que “sí”. Entonces, me contó su experiencia en Crehana, los cursos que había visto y los aportes en su vida profesional. Ese pequeño momento cuando escuché que mi trabajo estaba ayudando a otras personas, se llamó felicidad.
A lo largo de estos 4 años de mi vida en Crehana he podido ver la evolución de la calidad de los cursos y la plataforma. Todo esto gracias a personas comprometidas que están remando todos los días, cado uno en sus respectivas áreas. En mi caso, desde el lado de Tech, con el único objetivo de que los estudiantes estén contentos con el aporte de Crehana en sus vidas. Ahora puedo decir que Crehana pasó de ser un anónimo virtual a dejar huella, a conquistar los corazones de muchos estudiantes.
3. "Muchas veces me escriben para regalar mi curso. Ser una especie de “regalo” para otra persona me hace sentir especial"
Lucila Gam
Diseñadora de indumentaria y profesora en Crehana
Cuando recibí ese e-mail de Crehana con emoticones de aviones y una hermosa invitación que decía “estuvimos viendo tu trabajo y queremos invitarte a…”, realmente no lo creía. En ese momento no conocía Crehana, para ser sincera, y recuerdo que me puse a navegar un rato largo por su plataforma, como una especie de investigación. No sólo fue una sorpresa a nivel profesional, sino también en lo personal.
Para mí, tener estudiantes de distintos países es tener la oportunidad de conocer más personas y más cultura, es crear una red para aprender de ellos y con ellos. Esa interacción con los estudiantes y sus comentarios fue lo que me llevó a empezar un “Glosario Textil” que armamos entre todos en las redes sociales. Empezó con 8 países y ¡ahora participan 14! Esta comunidad no la hubiese logrado sin Cehana.
Muchas veces me escriben para regalar mi curso a madres, novias e hijas, y eso me saca una sonrisa enorme. Ser como una especie de “regalo” para otra persona me hace sentir especial. Hace poco me escribió una madre, me contó que su hijo de 7 años quería aprender a coser. Me preguntó si podía hacer el curso. Yo le fui sincera y le dije que lo recomendamos para 10 años en adelante. Horas después, me mando una foto de su hijo viendo mi curso, tomando notas y me escribió: “Sólo vengo a comentarte que mi hijo empezó el curso, está muy emocionado y está haciendo su lista de materiales para que lo lleve a comprarlos el fin de semana”. Yo quedé fascinada, me dieron ganas de conocerlo en persona.
Lucila Gam y su alumno de 7 años.
4. "La historia de Felipe Girarlo hizo que me diera cuenta que no hay límites para seguir aprendiendo"
Mr. Lemonade
Ilustrador y profesor en Crehana
Me enteré que Crehana quería invitarme a hacer un curso, gracias a un correo electrónico que me escribió Fico, donde decía que les gustaba mucho mi trabajo. Recuerdo que ese correo llegó justo un día después de platicar con Caro (mi esposa) donde le decía que tenía muchas ganas de viajar a Sudamérica. Fue una muy grata sorpresa y, obviamente, acepté ir.
La verdad, tener tantos alumnos es algo genial, no te voy a mentir. Sí creía que el curso podía llegar a muchas personas, pero nunca imaginé que pudiera superar los 20 mil alumnos en un curso y más de 90k entre los 4 cursos. Para mí, es realmente gratificante ser parte del crecimiento profesional de tantas personas. Me encanta leer que el curso lo sigan en tantas partes del mundo.
Tengo dos anécdotas. La primera fue leer sobre Felipe Girarlo, un chico que tuvo un accidente y quedó cuadripléjico, pero que sus ganas de seguir preparándose hicieron que se inscribiera en el curso y lo terminara. Leer su historia hizo que me diera cuenta que no hay límites para seguir aprendiendo.
Y la segunda: un día mientras estaba haciendo unas compras me encontré con un antiguo maestro de la universidad, que después ascendió a Director de la facultad de Diseño donde estudié. Lo chistoso de la anécdota fue que cuando lo saludé, me dijo muy feliz "Mira Gabo, quién diría, ahora yo soy tu alumno". Me tomó por sorpresa. Luego me dijo "Me inscribí a tu curso de Crehana y me ha servido mucho, hace mucho que no tomaba un curso y me pareció muy bueno, felicidades maestro". Sin duda, que él me contara que estaba tomando el curso me motivó mucho. Me hizo ver que, si te esfuerzas en seguir creciendo y aprendiendo, puedes convertirte de aprendiz a maestro.
5. "Con el portugués nos ha pasado cosas graciosas. Tuvimos que recurrir a Google Translate para responder algunos mensajes"
Marita
Customer Hapiness Coordinator en Crehana
Es bonito saber que la comunidad sigue creciendo cada vez más, que estamos llegando a más personas con nuestros cursos. Es increíble ver hacía atrás y recordar que antes recibíamos 100 mensajes al día y decíamos “¡wow tenemos 100 mensajes que atender!”.
Ahora recibimos el quíntuple de mensajes en nuestros canales. Pero poco a poco nos hemos ordenado para responder a todos a la brevedad posible. Además, el equipo se triplicó. El hecho de crecer ha hecho que replantemos nuestros flujos y veamos nuevas alternativas para seguir cumpliendo con los estudiantes. El primer mes de la cuarentena fue bastante estresante, porque nos enfrentamos a un nuevo número de mensajes.
¡Somos trilingües! Si nos escriben en inglés, todo bien. Pero con el portugués nos ha pasado cosas graciosas. De hecho, hemos aprendido algunas palabras. Es decir, nosotros podemos leer el mensaje del estudiante y lo entendemos, pero otra historia es responderle en portugués. Ha sido divertido, tuvimos que recurrir a Google Translate para responder algunos mensajes.
Otro momento gracioso fue cuando a algunas personas les empezaron a llegar su constancia en portugués. Algunos no se habían dado cuenta que estaba en otro idioma. Nos escribían para decirnos “está mal escrito”, pero de ahí les explicábamos y todo bien. Ahora estamos en un proceso de aprendizaje y mejoras.
¿Te sentiste identificado/a con alguna anécdota? Recuerda que la distancia no es un problema para seguir creciendo juntos. Gracias por ser parte de esta gran familia que continúa transformado vidas a través de la educación.