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Historias de Clientes

Como Crehana, nuestro propósito siempre ha sido revolucionar Latinoamérica a través de la educación y esto implica una transformación desde todos los frentes. Queremos ser un agente de cambio en la región, pero no solo eso. También queremos una Latinoamérica incluyente, basada en la diversidad y el respeto. 

Pero este cambio que buscamos no puede impactar únicamente en las habilidades creativas y digitales de las personas, sino también en la manera en cómo actúan y se comportan.

Sé que se trata de un objetivo gigantesco. Por eso, creo que, si queremos lograr un cambio como este, tenemos que empezar por nosotros y nosotras. Tenemos que cambiar la manera en que pensamos. Porque si como personas no nos transformamos, va a ser muy difícil que logremos nuestro gran objetivo.

La diversidad como principio

Quizás muchos y muchas no lo sepan, pero la diversidad ha sido parte de Crehana desde su fundación. Estamos seguros que, si construimos una cultura sobre los cimientos de la diversidad, vamos a lograr que los demás comprendan la importancia de tener un equipo diverso. Y si nuestra visión hace que otras empresas cambien su perspectiva, nos convertiremos en ese catalizador de cambio que ya hemos empezado a ser.

No hay creatividad sin diversidad

Una manera de lograr un equipo creativo y altamente funcional es construyendo una cultura donde exista la diversidad de opiniones y personas. Esa es nuestra clave. No nos enfocamos únicamente en tener un tipo de perfil. Porque creemos que en la diversidad se construye el futuro. 

Además, la diversidad no solo es parte de nuestro mecanismo de trabajo, es el vehículo que nos permite aprender más rápido y ayudar a que los demás aprendan más rápido también.

Quiero decirles que Crehana no sería lo que es hoy sin la diversidad y, definitivamente, es un pilar que vamos a mantener y hacer crecer a futuro.

Un liderazgo orientado a las personas

Otro de los principios en Crehana es el liderazgo desde un punto de vista humano. Los y las líderes no somos una figura diferente, somos como cualquier otra persona. Estamos en la cancha, en la guerra y en la tierra, como todos. Este es el pensamiento que ha llevado a Crehana a ser como es. 

Aceptamos nuestras diferentes maneras de pensar y de ser. No juzgamos a nadie. Esa es la forma en que trabajamos. De hecho, el objetivo del liderazgo en Crehana es hacer crecer a las personas, y la única manera de poder hacerlo es aceptando que tenemos un equipo diverso y que los líderes y las líderes son parte de un grupo de personas.

El efecto multiplicador

Las personas que lideran son, de alguna manera, las que definen, porque tienen las pautas y la ruta. Entonces, si como Crehana, empezamos a construir un liderazgo mucho más inclusivo, estoy seguro que eso tendrá un efecto multiplicador. Ellas y ellos serán los que ayuden a otros líderes de Latinoamérica a ser más inclusivos y tener una visión más humana.

Este mes hemos realizado varias acciones para educarnos internamente. Si se preguntan «¿por qué es necesario educarnos en la diversidad con frecuencia?», es porque ser parte de Crehana significa aprender en conjunto. Quizá son charlas que ya hemos escuchado antes, pero recordemos que siempre se aprende sobre la constancia.

Y si tenemos más personas en el equipo que puedan pensar como pensamos y que traduzcan ese mindset a sus familias, amigos o amigas, también se va a producir ese efecto multiplicador que buscamos.

En Crehana tenemos que entender que el futuro del trabajo depende de nosotros y nosotras, y que ese es nuestro punto de partida. 

4 consejos para las empresas que aún dudan sobre la diversidad

1. No sirve de nada ser parte de algo en lo que no se cree. Sumarse a una iniciativa para solo pintar tu logo con los colores de Pride, no sirve. No se debe ser parte de algo solo porque los demás lo hacen o porque hay una perspectiva de marketing detrás.

Para unirse, primero tienen que entender que la diversidad debe ser internamente así. Si no existieran los colores de Pride, estoy seguro que seguiríamos educando en la diversidad, porque es parte de nuestra cultura.

2. Si la diversidad no es parte de la cultura, los valores y los principios de la empresa, es inútil sumarse. Tenemos que empezar a construir una cultura incluyente. Ser una compañía de alto rendimiento y crecimiento depende del talento, más que cualquier cosa. 

Si buscamos construir sobre el talento, no nos va a importar quién es, cómo es y de dónde viene. Tenemos que construir los mecanismos para que las personas que no entiendan por qué la diversidad es parte de nuestra cultura lo puedan entender y ayuden a los demás a comprenderlo. 

3. Los líderes tienen que ser parte de la cultura de la diversidad. Para poder lograrlo, tienen que entender que este tema es importante para muchas personas. Tienen que saber que tienen un equipo que es parte de la Comunidad LGTBQ+ y que estas acciones son importantes para ellos y ellas. La empatía es imprescindible. ¿Cómo empezar? Desde la primera línea de liderazgo. 

4. Todo parte de cómo construimos nuestros equipos. Las compañías que están trabajando sobre el futuro deben entender que esta transformación parte de cambiar la manera de cómo construimos un equipo de personas. Si queremos pintar nuestros logos con los colores de Pride, pero no cambiar nuestra mentalidad, solo nos estamos subiendo a la ola y, como menciono en el segundo punto; así no seremos parte del cambio. 

Se necesita hacer un análisis profundo de lo que buscamos construir como cultura.

 

Para mí, el significado de Pride y de todo lo que sucede alrededor de la Comunidad LGBTIQ+ se traduce a trabajar sobre nuestros tres pilares: respeto, transparencia y diversidad. Y esa es la raíz de Crehana, sobre eso nacimos y sobre eso seguiremos creciendo.

 

Un abrazo para todas y todos.

 

Diego Olcese

CEO & Founder @Crehana