Home Blog/ Desempeño/
Desempeño

La medición del rendimiento laboral de los trabajadores es una de las principales tareas de un HR Manager, no solo para evaluar la productividad individual, sino también para alinear estratégicamente los objetivos de su departamento con la visión global de la organización.

Como explican Greg Satell y Cathy Windschitl en  Harvard Business Review, la diferencia entre el éxito y el fracaso se encuentra en la capacidad que tengan los líderes de articular las competencias individuales con un propósito superior, y eso llega con el entendimiento de los valores que se comparten.

Por ello, una de las metas clave para los profesionales de RR. HH. es poder alinear estos objetivos y cuantificar el impacto directo de las iniciativas implementadas por su equipo en la empresa en su conjunto, como la mejora del rendimiento de los empleados. En este artículo te compartiremos los pasos esenciales para evaluar el desempeño laboral en empresas con un gran número de colaboradores, y traducir su valor en métricas tangibles.

 

Define OKR claros y medibles

Antes de iniciar cualquier evaluación de desempeño, es fundamental establecer OKR (objetivos y resultados clave) específicos y medibles para medir el rendimiento laboral. Esto podría incluir metas individuales, metas de equipo y objetivos estratégicos del departamento de recursos humanos que estén alineados con los objetivos generales de la empresa.

Es importante que los objetivos no se aborden de manera aislada. Los HR Managers deben tener en cuenta cómo los objetivos de recursos humanos se entrelazan con los objetivos de otros departamentos y contribuyen al éxito general de la empresa. Esto promueve la colaboración interdepartamental y evita objetivos contradictorios.

De hecho, hay plataformas de evaluación de desempeño que tienen esta función integrada, permitiendo que los objetivos de cada departamento estén conectados con los de la compañía. Así, es posible establecer la dependencia entre ellos para prevenir futuros retrasos en el cumplimiento del objetivo principal.

Una vez que los objetivos estén definidos, es crucial comunicarlos a todos los miembros del equipo. Asegurarse de que todos comprendan cómo sus contribuciones individuales se alinean con los objetivos generales crea un sentido de propósito y compromiso. 

Sin duda, estos objetivos proporcionan una base sólida sobre la cual se pueden construir estrategias de medición, recopilación de datos y evaluación continua. Al adoptar un enfoque riguroso en la formulación de objetivos, las organizaciones grandes pueden establecer un camino claro hacia el logro de sus metas y la mejora constante de su rendimiento laboral empresarial.

alineación de objetivos OKR CrehanaPlataforma Desempeño de Crehana

Selecciona los KPI más relevantes

Los Key Performance Indicators (KPI) son métricas cuantificables que permiten medir el progreso hacia los objetivos establecidos y evaluar el rendimiento laboral de manera cuantitativa. 

Al identificar y utilizar estas métricas, las empresas grandes pueden tener una visión más completa y objetiva del rendimiento de los empleados. Estas métricas permiten tomar decisiones informadas, ajustar estrategias según sea necesario y medir el impacto de las iniciativas de recursos humanos en la organización en general.

Los HR Managers deben identificar los KPI relevantes para medir aspectos como la productividad, la satisfacción del personal, la retención del talento y la eficiencia en los procesos de recursos humanos. Es importante identificar una variedad de KPI que aborden estos aspectos para realizar una evaluación completa y efectiva.

Recuerda que los KPI no son estáticos y pueden evolucionar con el tiempo. A medida que la empresa crece, cambian las dinámicas del mercado y se implementan nuevas estrategias en la gestión del rendimiento, los KPI también deben ajustarse para reflejar estas realidades cambiantes.

 

Identifica tendencias e insights

La medición del rendimiento laboral no es un proceso estático. Las evaluaciones de desempeño deben realizarse de manera continua para identificar tendencias y áreas de mejora. Además, proporcionar retroalimentación constante a los empleados sobre su desempeño contribuye a un mejoramiento efectivo.

De hecho, la evaluación continua y la retroalimentación son elementos esenciales en la medición efectiva del rendimiento laboral de los trabajadores. Estos procesos no solo permiten un seguimiento constante de los objetivos y metas, sino que también brindan la oportunidad de ajustar estrategias, proporcionar orientación y promover el desarrollo personal y profesional. 

Ciclo de evaluación regular

En una empresa con un gran número de empleados es indispensable establecer ciclos de evaluación regulares, que pueden ser trimestrales, semestrales o anuales, según la naturaleza de la organización y los roles de los empleados. Estos ciclos proporcionan un marco para evaluar el rendimiento laboral y el progreso en relación con los objetivos establecidos.

Dentro de cada ciclo de evaluación, es beneficioso establecer metas intermedias para cada empleado. Estas metas permiten medir el progreso a lo largo del tiempo y brindan oportunidades para realizar ajustes si es necesario.

Aquí es importante que los HR Managers y los líderes proporcionen retroalimentación específica, objetiva y constructiva sobre el desempeño de los empleados. Esta retroalimentación debe centrarse tanto en los aspectos positivos como en las áreas de mejora.

herramienta de feedback en la plataforma Desempeño de CrehanaPlataforma Desempeño de Crehana

Aplica la evaluación por competencias

Además de medir resultados tangibles, puedes adoptar una evaluación por competencias, donde se evalúan las habilidades, comportamientos y actitudes de los empleados en relación con las competencias clave requeridas para el éxito en sus roles. Estas competencias pueden variar según la naturaleza del trabajo y pueden incluir habilidades técnicas, habilidades interpersonales, habilidades de liderazgo y más.

A diferencia de la evaluación tradicional que se enfoca principalmente en los resultados cuantitativos, la evaluación basada en competencias busca comprender cómo un empleado aplica sus habilidades en situaciones reales y cómo su comportamiento contribuye al logro de los objetivos.

Durante el período de este tipo de evaluación de rendimiento laboral, los supervisores y gerentes observan y recopilan datos sobre el comportamiento y el desempeño de los empleados en relación con las competencias identificadas. Esto puede incluir ejemplos específicos de situaciones en las que un empleado haya demostrado una competencia particular.

La evaluación basada en competencias no se trata solo de medir a cada empleado de manera aislada. También implica comparar el desempeño de un empleado con las expectativas y estándares de las competencias establecidas. Esto ayuda a identificar brechas en el desempeño y áreas de mejora para potenciar el rendimiento laboral dentro de la empresa.

Plataforma Desempeño de CrehanaPlataforma Desempeño de Crehana

Permite la autoevaluación

La autoevaluación de desempeño permite a los empleados evaluar su propio performance, habilidades y competencias. Esta herramienta puede ser valiosa para promover la autorreflexión, la toma de conciencia y el desarrollo personal. 

A través de herramientas de evaluación de rendimiento laboral, los empleados pueden identificar sus propias fortalezas y áreas de mejora. Esto les permite enfocarse en el desarrollo personal y en trabajar en aquellas competencias que pueden necesitar más atención.

Además de evaluar su propio desempeño, los empleados pueden proporcionar retroalimentación sobre su entorno de trabajo y sus interacciones con compañeros y líderes. Esto proporciona información valiosa sobre la cultura organizacional y las dinámicas internas.

La autoevaluación también puede servir como punto de partida para una retroalimentación efectiva con los líderes durante las evaluaciones formales. Comparar la autoevaluación del empleado con la evaluación del supervisor puede llevar a conversaciones más profundas sobre el desempeño y el desarrollo.

En pocas palabras, la autoevaluación fomenta un sentido de autonomía y responsabilidad en los empleados. Les permite ser protagonistas de su propio desarrollo y empoderarlos para identificar formas de mejorar su rendimiento laboral.

Por lo tanto, un modelo de autoevaluación de desempeño es un recurso que puedes comenzar a implementar en tu empresa, con el objetivo de identificar la percepción de tus colaboradores sobre su labor en la organización, así como identificar oportunidades de mejora que impacten de manera positiva en el fortalecimiento de sus habilidades.

plantilla de autoevaluación de desempeño Fuente: Crehana

Crea un plan individual de desarrollo para cada empleado

Una vez obtenido los resultados de la evaluación de desempeño, puedes crear un plan individual de desarrollo (PID) para cada empleado. Estos planes identifican áreas de mejora y oportunidades de capacitación o desarrollo para ayudar a los colaboradores a alcanzar su máximo potencial.

Para ello, debes definir las acciones específicas que el empleado debe llevar a cabo para lograr los objetivos de rendimiento laboral. Esto puede incluir la participación en cursos de capacitación, la adquisición de habilidades técnicas, la adopción de responsabilidades adicionales y más.

Los PID no se centran solo en el desarrollo de habilidades técnicas, sino también en el crecimiento personal y profesional en general. Esto puede incluir el desarrollo de habilidades de liderazgo, habilidades de comunicación, inteligencia emocional y más.

Al proporcionar un enfoque estructurado y personalizado para el crecimiento, las empresas pueden cultivar un ambiente de aprendizaje y mejora constante que beneficia tanto a los empleados como a la organización en su conjunto.

plan individual de desarrollo CrehanaPlataforma Desempeño de Crehana

Al seguir estos pasos esenciales, las empresas pueden obtener una comprensión más profunda y completa del impacto de sus empleados en el éxito organizacional y tomar decisiones informadas para el crecimiento continuo.

Recuerda que medir el rendimiento laboral no es simplemente un ejercicio de números y estadísticas, sino un proceso que implica el compromiso de las empresas con el desarrollo de sus equipos. A medida que la interacción entre todas las áreas de la compañía se convierte en una relación de colaboración y crecimiento, el camino hacia el éxito sostenible se traza con cada métrica evaluada, cada objetivo logrado y cada empleado que prospera en su trayectoria.