El reclutamiento interno es una de las tendencias de contratación actuales. Su popularidad recae sobre sus enormes ventajas logísticas y estratégicas. Según las estadísticas del artículo del blog Thrive My Way, portal especializado en Negocios, el reclutamiento interno es 6 veces más efectivo que cualquier otra fuente de talento.
Pero, además de acercarte al candidato ideal, la contratación de talento interno es muy económica para la empresa. El ahorro de costos a largo plazo significa que la compañía tendrá la posibilidad de invertir en otros aspectos para potenciar la gestión de talentos: herramientas de comunicación, plataformas de desarrollo profesionales, etc.
Por ello, entender el concepto de reclutamiento interno y en qué consiste es imprescindible para resguardar la competitividad de una empresa. A continuación, te explicaremos en qué consiste el reclutamiento interno, sus ventajas y desventajas, y cómo hacer un reclutamiento interno con éxito.
¿Qué es el reclutamiento interno?
Se trata del proceso que toma como candidatos para cubrir un nuevo puesto a los profesionales que están laborando en la empresa. El objetivo de esta práctica es hacer una transferencia simple a otro cargo, ya sea a través de una promoción o ascenso.
Dicho de otra manera, cuando una empresa recurre al reclutamiento interno decide cubrir nuevos roles o posiciones vacantes con personas que ya son parte de su fuerza de trabajo. Esto significa que un empleado de otro departamento, equipo o función pasa a asumir el puesto ofertado o promocionado.
Esta forma de reclutamiento en Recursos Humanos tiene muchas ventajas para una empresa. Desde el ahorro de dinero y tiempo hasta una aclimatación más rápida al nuevo rol. No obstante, no siempre es funcional para todas las organizaciones. Por ello, hay que tener en cuenta cuáles son las necesidades de cada empresa en particular.
¿Cuáles son los tipos de reclutamiento interno?
En nuestra guía de reclutamiento y selección de personal exploramos diversas fuentes para hacer un reclutamiento interno. Como mencionamos antes, todas están enfocadas en conectar a las personas que están trabajando en tu empresa con las oportunidades laborales que surgen en la misma.
A continuación, veremos cuáles son las más utilizadas hasta el momento:
1. Promoción interna: ocurre cuando se promueve a un empleado a una posición de mayor rango, responsabilidad y salario. Por ejemplo, una persona puede pasar de ser Asistente a Coordinador.
2. Transferencias: esta clase de reclutamiento interno se practica en empresas con oficinas en diversas ciudades o países. Es posible que la compañía tenga nuevas necesidades o el mismo empleado solicite el cambio. En este contexto, la transferencia puede involucrar una promoción o no.
3. Reorganización: debido a la venta de la empresa a otros dueños, la reducción de personal o un cambio de industria, una reorganización implica el traslado de un empleado de un puesto de trabajo a otro. Por ejemplo, una compañía puede empezar el reclutamiento interno para mover a un Gerente de Logística a Jefe de Operaciones en planta.
4. Cambios de roles: sucede cuando un empleado muestra destrezas y voluntad para asumir un rol totalmente distinto al que cumple. En este caso, la empresa ejecuta el reclutamiento interno de personal conociendo el desempeño de la persona, su potencial en el nuevo puesto y el margen de beneficio que puede producir.
5. Recontratación: implica traer de vuelta a una persona que fue parte de la empresa tiempo atrás. Debido a que él o ella conoce el funcionamiento de la compañía, puede adaptarse a su nuevo cargo fácilmente. Ahora bien, te recomendamos considerar esta dinámica únicamente si la relación laboral llegó a su fin por razones ajenas al desempeño.
6. Programa de referidos: consiste en pedir a tu equipo información sobre personas que estén capacitadas para cubrir un puesto en específico. Se le considera una fuente de reclutamiento interno porque estos candidatos conocen acerca de la empresa por un contacto directo. De hecho, es común que estén entusiasmados por ser parte de ella.
¿Cuáles son las ventajas y desventajas del reclutamiento interno?
El reclutamiento interno en una empresa es una buena práctica para acelerar un proceso de selección y, por supuesto, para ahorrar recursos. Sin embargo, para que una estrategia interna de atracción de personal tenga éxito, hay que evaluar muy bien las necesidades que tiene la compañía.
Ventajas del reclutamiento interno
Exploremos las razones por las que muchas empresas están poniendo su atención en el personal que tienen en planilla:
1. Reducción de tiempos para contratar
Según un estudio publicado en el blog de Thrive My Way, el tiempo promedio para contratar un nuevo empleado es de 41 días. Esto supone más de un mes entre la búsqueda, el contacto y el proceso de selección.
La principal ventaja del reclutamiento interno es que acorta días precisamente en estas 3 etapas. De hecho, las fases de exploración y toma de contacto son instantáneas, puesto que los potenciales candidatos son conocidos por la organización.
2. Onboarding más rápido
Otro de los beneficios más importantes de reclutar internamente es la reducción del tiempo que lleva el proceso de onboarding. Debido a que estamos tratando con una persona familiarizada con la cultura corporativa, la misión y los equipos, muchas de las capacitaciones de esta etapa se pueden obviar.
Como resultado, tendremos mucho espacio y tiempo para reforzar sus habilidades de cara al nuevo puesto. Es probable que, al momento de empezar a trabajar en su nuevo rol, ya haya tenido contacto con su nuevo equipo y sepa de las dinámicas diarias de la función.
3. Ahorra de costos en proceso de contratación
Un presupuesto de reclutamiento externo siempre implica costos importantes a considerar por la organización. Por el contrario, si sabes cómo hacer un reclutamiento interno, el gasto se reduce considerablemente.
Por ejemplo, no tienes que invertir en publicaciones a medida en portales de empleo ni en la contratación de job hunters. Tampoco requieres de un software especializado para detectar a los mejores candidatos o gestionar la nueva documentación. Mucha de esta información ya existe en la base de datos de la empresa.
4. Mayor employee engagement
En una encuesta de LinkedIn citada en el blog de Talent Guard se menciona que el 94% de compañías consideran que los procesos de reclutamiento interno mejoran la retención del talento. Esto se deriva claramente del employment engagement que genera ser reconocido a partir de una promoción.
Si el empleado advierte que la empresa se preocupa por su carrera profesional interna, con una actualización de sus beneficios, se sentirá valorado y motivado, lo cual lo llevará a aumentar su compromiso con el equipo y la labor que realiza.
Desventajas del reclutamiento interno
Así como los beneficios del reclutamiento interno se deben resaltar, no se pueden negar las desventajas asociadas a este proceso. Claro que algunos de los puntos negativos se pueden mitigar con acciones oportunas.
Además, nos parece importante resaltar este aspecto ya que debes revisarlos antes de llevar a cabo una estrategia de reclutamiento interno. Recuerda hacer un contraste entre los objetivos de tu compañía y estos puntos:
- Cantidad de participantes limitada.
- Dinámicas de competencia no saludables.
- Actitudes y sentimientos negativos en otros empleados.
- Dejar vacante un puesto de trabajo.
- Falta de visión nueva.
- Oportunidad pérdida para integrar más talento diverso.
¿Cómo hacer un proceso de reclutamiento interno?
Al desarrollar una estrategia de reclutamiento interno, es necesario enfocarse en la detección de empleados que cuenten con las destrezas de mayor potencial. Al respecto, Mariana Macazaga, profesora de nuestro curso online de Reclutamiento Agile, menciona que las habilidades para el futuro y el presente más importantes son la adaptabilidad, el pensamiento crítico, la empatía, la integridad, el optimismo, la proactividad y la resiliencia.
Además de ello, en todo plan de reclutamiento interno, debes mantener niveles de transparencia y de equidad en relación a la participación de los empleados. En las siguientes líneas, te dejamos una lista de pasos a seguir para hacer un reclutamiento interno eficiente.
1. Establecer políticas de contratación
Es fundamental contar con documentos que comuniquen los principios de la contratación interna. No basta con que estos sean parte de las conversaciones con los colaboradores. La comunicación de requisitos, condiciones y parámetros debe ser clara desde que ingresan a la empresa.
De esa manera, una vez que inicie el proceso de reclutamiento interno, todos saben a qué atenerse de cara a los resultados de contratación, lo que previene malentendidos y una posible contaminación del clima laboral.
2. Promocionar la oferta de trabajo
Para promocionar una oferta de reclutamiento interno, hace falta más que enviar un correo general. Debes hacer uso de múltiples recursos que permitan que los candidatos ideales se enteren del proceso en las mismas condiciones.
Por ejemplo, puedes usar un software de gestión de candidatos y una página de carrera interna. En ellas, tienes que clarificar las etapas del proceso, los requerimientos, las fechas y todo lo necesario para hacer un reclutamiento interno exitoso.
3. Valorar objetivamente a los candidatos
Aquí se trata de anular cualquier tipo de favoritismo o de prejuicio sobre un candidato u otro. Dado que son candidatos con los que ya se tiene relación, puede suceder que, inconscientemente, la balanza se incline hacia un lado.
Por ello, asegúrate de incluir distintas fuentes de reclutamiento interno mediante las cuales puedan participar personas como veedoras y agentes de filtros del proceso. Es conveniente que tomes en cuenta objetivamente opiniones de colegas, compañeros del equipo, managers, ejecutivos y colaboradores.
También, te recomendamos hacer uso de una plataforma de Evaluaciones de Desempeño para conocer cómo es el rendimiento del equipo, al igual que su progreso en el tiempo. Esto te ayudará a tomar mejores decisiones, sobre todo si se trata de hacer una promoción laboral.
Plataforma de Evaluación de desempeño laboral de Crehana
4. Comunicar resultados con transparencia
Esta última etapa del proceso de reclutamiento interno es indispensable. Luego de comunicar el resultado favorable al candidato elegido, debes tomarte un tiempo para transmitir la decisión final a aquellos que no fueron elegidos.
Si las políticas de reclutamiento interno estaban claras desde un inicio, será más fácil explicar a cada uno las razones de la decisión. Esto reducirá la posibilidad de despertar malos sentimientos y actitudes nocivas para el ambiente de trabajo futuro.
Finalmente, te compartimos los siguientes consejos para que el reclutamiento interno pueda acercarte a tus objetivos de contratación:
- Valora el esfuerzo de los empleados no solo con promociones, sino también con otras oportunidades.
- Entrena a los Managers para que contribuyan con las líneas de carrera de los empleados.
- Asegura que todas las fases del reclutamiento interno sean llevadas a cabo con transparencia.
- Notificar a los candidatos no elegidos con respeto y empatía. Hay que agradecerles por haber dedicado tiempo al proceso de selección interna de personal.
- Involucra diversas fuentes de evaluación interna.
Estamos seguros de que, con esta información y recomendaciones, podrás implementar un proceso de reclutamiento interno acorde con las necesidades de tu empresa. A pesar de que esta dinámica es muy beneficiosa en términos de tiempo y dinero, lo ideal es lograr un balance entre el reclutamiento interno y externo.
Mira con paciencia y estrategia las cualidades de tus colaboradores, y evalúa si tienen el potencial para seguir impulsando el crecimiento del negocio. Si has logrado armar un programa de desarrollo profesional efectivo, es bastante probable que encuentres al candidato ideal para ese puesto vacante entre tu equipo.