Home Blog/ Transformación cultural/
Transformación cultural

Las empresas que gozan de una identidad sólida y un buen clima laboral saben que no se debe elegir a un postulante únicamente por su experiencia y skills, sino también por su capacidad de integración en función a su cultura organizacional. Y cuando hablamos de cultura organizacional, nos referimos a ese grupo de valores, comportamientos y normas que comparten las personas dentro de una compañía; es decir, lo que diferencia a una empresa de las otras.

¿Sabías que el éxito de una cultura organizacional también depende de los nuevos talentos? ¿Y si al final el nuevo ingreso resulta perjudicial para el ambiente organizacional y no responde a los valores de la empresa? El departamento de recursos humanos no se lo perdonaría.

Es por lo anterior que el proceso de selección no acaba realmente con la contratación. De hecho, algunas empresas aplican un mecanismo de filtro conocido como «periodo de prueba». Así pueden evaluar al profesional, saber cómo se relaciona con sus compañeros y cómo reacciona frente a situaciones puntuales. ¿Eres de los que se integra fácilmente o les cuesta hacerlo?

En Crehana para Empresas fomentamos una cultura de skilling continuo, por eso sabemos que hay ciertas habilidades que pueden ayudarte a tener una mejor adaptación a la cultura organizacional de tu empresa rápidamente. Conócelas en esta nota y obtén esa contratación definitiva.

¿Te imaginas aprender al estilo de Netflix? Consíguelo con Crehana Empresas

1. Empatía

Muchos líderes como Tim Cook, CEO de Apple, han destacado la importancia de los talentos con capacidad para comprender las emociones del otro. Si la cultura organizacional de tu empresa se centra en la colaboración, la flexibilidad y los valores éticos, la empatía es esa habilidad que te permitirá adaptarte rápidamente.

Pero, ¿qué es la empatía? No es un don, como algunos creen, es una soft skill que puede desarrollarse y potenciarse. ¿Quieres conectar con tus compañeros y transmitir tu espíritu colaborativo? Muy bien, primero: no confundas empatía con simpatía. La simpatía es el afecto entre personas y la empatía es, como indica la RAE, «el sentimiento de identificación con algo o alguien».

Segundo: escucha a las personas con las que interactúas. Procura no interrumpir y abusar de tu opinión y recuerda lo más importante: presta atención al mensaje sin juzgar. Tercero: sé paciente y observa la comunicación no verbal. Y, por último: dale mayor atención a lo que las personas sienten.

Por ejemplo: ¿Qué le dirías a una compañera que acaba de contarte que su campaña de marketing superó los resultados?

A. ¿Y cuánto lograron el año pasado?

B. Es una noticia genial, ¡hay que celebrarlo!

Si has respondido la opción "B", estás en el camino de la empatía.

2. Adaptación al cambio

La adaptación al cambio exige que conozcamos a fondo el nuevo contexto en el que nos desenvolveremos. Para ello, es necesario hacer lo siguiente: identificar cuáles son los cambios a los que debes adecuarte y actuar en concordancia a ellos.

¿Puedo hacer algo más? Sí, por ejemplo, revisar el reglamento interno o los principios rectores de tu empresa. Por lo general, los responsables de recursos humanos entregan estos documentos durante el programa de inducción.

Recuerda que la adaptación al cambio es esa soft skill imprescindible para sobrevivir a la velocidad de los procesos. Lo mejor: una vez que la adquieres, la puedes aplicar a cualquier entorno.

Descarga el ebook de cultura organizacional

3. Comunicación eficaz

Si hay una habilidad que te permitirá adaptarte rápidamente a la cultura organizacional de tu empresa, es la comunicación eficaz. No se trata solo de saber comunicar nuestras ideas claramente y sumar efectos individuales, sino de lograr sinergias positivas entre los equipos de trabajo.

¿Cómo lograr tener una comunicación eficaz? Siendo breve, preciso y oportuno al momento de coordinar nuestras tareas con los demás.

Es importante que los profesionales de hoy reflexionen sobre lo perjudicial que puede ser para el desarrollo de sus tareas no poseer esta habilidad. Como sabemos, la comunicación indirecta y confusa puede provocar malos entendidos, romper relaciones y, por lo tanto, obstaculizar los procesos.

Recuerda que la comunicación eficaz es fundamental en las relaciones interpersonales fuera y dentro de una empresa.

4. Capacidad de aprendizaje

Del 1 al 10, ¿cómo calificarías tu deseo de aprender? Si no es constante, recuerda que la capacidad de aprendizaje no solo te ayudará a integrarte fácilmente a la cultura organizacional de una empresa, sino también a ser empleable.

Por lo tanto, tu capacidad para mantener tu empleo dependerá también de lo que aprendas en el futuro. No caigas en el error de pensar que ya lo dominas todo y que, por eso, no tienes que preocuparte en aprender nuevas habilidades. Recuerda que las skills no son exclusivas de las profesiones. 

Según un  informe realizado por ManpowerGroup , "la digitalización y el crecimiento en el trabajo calificado traerá oportunidades, siempre que las organizaciones y los individuos estén listos (…) La gente reconocerá cada vez más que necesita mejorar y diversificarse en nuevas áreas. Habilidades próximas como la agilidad y la capacidad de aprendizaje serán cruciales”.

Es cierto, las empresas del mañana demandarán profesionales que estén dispuestos a aprender. Si tu empresa fomenta el aprendizaje continuo, solo hay una opción: aprende a aprender.

5. Proactividad

Ser una persona proactiva significa, básicamente, tener iniciativa, ser responsable y aportar soluciones. Esta habilidad te permitirá conectar con la cultura organizacional de tu empresa más rápido de lo que crees. Pero, ¿cómo identificar a alguien que no posee esta habilidad?

Un profesional proactivo no diría frases como “¿En serio tengo que hacer esto?” o “Tal vez mañana intente hacerlo”. Esto se conoce como lenguaje reactivo. Por el contrario, un talento proactivo diría lo siguiente: “Quiero hacer esto” o “Yo lo puedo hacer”.

Si todavía no sabes cómo mejorar tu proactividad, sigue estos consejos:

- Convierte las ideas en acciones.

- No cumplas el rol de un espectador, actúa.

- Anticípate a los problemas.

- No se trata de cumplir órdenes, sino de encontrar oportunidades.

- Sé flexible.

Fomenta una cultura de skilling continuo. Hazlo posible con Crehana Empresas

La cultura organizacional es la base fundamental de las relaciones interpersonales en una empresa. Por eso, como profesionales, debemos ser capaces de adaptarnos a los entornos laborales que exige el mundo empresarial de hoy. Aprender es estar un paso adelante. ¿Quieres saber cómo lograrlo?

En Crehana para Empresas construimos experiencias digitales de aprendizaje, te invitamos a aprender con nosotros.