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Transformación cultural

El panorama laboral se encuentra en constante transformación. La globalización, el relevo generacional y los avances tecnológicos han provocado que las empresas tengan que adaptarse continuamente para mantenerse vigentes en una sociedad y un mercado muy cambiantes. Estos cambios se vieron acelerados por la cuarentena en la que estuvo sumido todo el orbe dejándonos vislumbrar hacia dónde apunta el futuro del trabajo y cómo serán los equipos del futuro.

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El trabajo y los trabajadores hoy

Un artículo de Forbes sobre el futuro del trabajo describe el panorama laboral actual como uno lleno de empleados de tiempo completo —improductivos e infelices— que sacrifican su vida personal por entregar la mayor parte de su tiempo al trabajo a cambio de una falsa promesa de estabilidad y progreso profesional.

Aunque ese escenario casi distópico todavía puede puede tener algo de cierto y revela algunos vicios laborales y sociales, la descripción anterior ya está un poco desactualizada. El paisaje laboral se ha reconfigurado dramáticamente durante los últimos meses, lo cual ha tenido implicaciones y consecuencias para millones de personas y también para las empresas, que han comenzado a reinventarse y a repensar su papel en la sociedad y su modelo de negocio. 

El panorama laboral es hoy más flexible. Las estructuras verticales y las jerarquías rígidas tradicionales le han cedido paso a los equipos de trabajo, a los esquemas de trabajo remoto o híbridos, al boom de los freelancers y el nomadismo digital entre otras tendencias que están reinventando la manera en la que se trabaja.

Equipo de trabajo en oficina con sana distancia y cubrebocas

Fuente: Steelcase.

Las expectativas laborales para el futuro

Se estima que para el 2025 el 75% de la fuerza laboral estará compuesta por millennials. Así que serán los hábitos y las expectativas laborales de esta generación los factores que ayudarán a configurar la cultura organizacional de las empresas del futuro. Algunos de los factores que más valora esta generación —y que tendrán cada vez más peso al momento de elegir en qué empresas trabajarán— son la agilidad, la adopción de nuevas tecnologías, la confianza y una cultura laboral abierta y flexible, como mencionamos anteriormente. 

Es por esto que Business Insider señala que el trabajo del futuro “será menos centralizado, más móvil y más flexible que cualquier cosa que la mayoría de las personas que se encuentran fuera de los modelos de trabajo freelance y el de las startups hayan experimentado antes”. Y las empresas deberán ofrecer un ambiente laboral diverso e incluyente que garantice que sus colaboradores se sientan valorados y tengan independencia al tiempo que formen parte de equipos que permitan el trabajo colaborativo para la resolución de problemas.

Además, después de haber pasado meses trabajando desde casa, la fuerza laboral se ha replanteado lo que espera de un trabajo, por lo que las expectativas laborales se han elevado hacia una experiencia radicalmente distinta y mejor que la que tenían antes de la pandemia. Tras diversos estudios realizados por Steelcase se identificaron 5 necesidades críticas o expectativas laborales por parte de los colaboradores para cambiar su experiencia laboral. Se trata de las siguientes:

  1. Seguridad. Para que los colaboradores regresen a sus lugares de trabajo necesitan sentirse seguros. La pandemia ha provocado que las personas se sientan muy vulnerables, por lo que la seguridad se vuelve un imperativo. Esto tiene que ver no únicamente con la pandemia, sino con temas como la contaminación, la calidad del aire y los protocolos de seguridad de las organizaciones. 
  2. Pertenencia. El aislamiento al que se ha sometido la sociedad ha exponenciado la necesidad de conectar y sentirse parte de una comunidad. Lograr esto en el trabajo es una tarea esencial para los líderes de las compañías. Uno de los principales motivos por los cuales la gente desea volver a las oficinas es el deseo de conectar y tener un propósito. Por otro lado, el sentimiento de pertenencia coadyuva a la productividad, el engagement, la innovación y el compromiso con la organización.
  3. Productividad. Existe la sensación de que lo que hacen no importa o no es significativo. Muchas empresas tendrán que cambiar sus condiciones de trabajo para ofrecer a sus colaboradores espacios que permitan y fomenten la resolución de problemas, la innovación y el trabajo creativo. 
  4. Bienestar. Las empresas deberán preocuparse cada vez más por el bienestar físico y emocional de sus colaboradores.
  5. Control. Como consecuencia de uno de los aprendizajes adquiridos durante la pandemia, los equipos de trabajo del futuro esperan que sus empleadores les permitan tener un mayor control y libertad en la toma de decisiones sobre la organización de sus prioridades y sus métodos de trabajo, así como en el balance entre el trabajo y la vida personal.

Infografía sobre el trabajo del futuro

Fuente: Deloitte Insights.

Los equipos de trabajo del futuro

Como hemos mencionado, el trabajo remoto ha cambiado la experiencia laboral alrededor del mundo. Mientras algunos sugieren que las oficinas tradicionales desaparecerán debido a la adopción masiva —y de alguna manera forzada— del trabajo remoto, recientemente The Wall Street Journal publicó un reportaje sobre el regreso a las oficinas por parte de varias empresas grandes para quienes el trabajo remoto se ha vuelto insostenible. 

Los resultados de las investigaciones realizadas por Steelcase sugieren que los equipos de trabajo del futuro serán híbridos, conjugando las labores presenciales con las remotas con mayor flexibilidad. En la mayoría de los países de los que se recogieron datos, la mayor parte de los encuestados afirmaron que esperan trabajar desde casa una vez a la semana. 

Fuente: Unsplash.

Pero, en última instancia, cada empresa deberá sopesar la solución más apropiada para su cultura organizacional y sus colaboradores. Actualmente sólo un 5% de las empresas esperan continuar trabajando desde casa, mientras que el 23% continuará trabajando principalmente en la oficina, y la gran mayoría —el 72%— están buscando métodos híbridos que incluyen oficinas satélite y espacios de coworking.

Por otra parte, en su libro The Leadership of Teams: How to Develop and Inspire High-Performance Teamwork, Mike Brent y Fiona Elsa Dent mencionan algunos de los retos que enfrentan los líderes de las organizaciones para estar a la altura de los equipos del futuro:

  • Equipos multigeneracionales. Las empresas ya han comenzado a contar entre sus colaboradores a miembros de tres generaciones distintas. Un típico equipo del futuro, entonces, será multicultural —diverso e incluyente— y multigeneracional. Lograr que estos equipos de trabajo fluyan armónicamente y logren crear una sinergia será uno de los principales retos que enfrentarán los líderes.
  • Nuevas dinámicas de trabajo. Los flujos de trabajo y las dinámicas de equipo seguirán cambiando en los próximos años de la mano de la tecnología, lo cual provocará que las jerarquías también se reorganicen de una manera más natural y horizontal. “En lugar de que los equipos tengan un solo líder a cargo, cada miembro del equipo deberá desarrollar la habilidad tanto de liderar como de seguir”, afirma Fiona Dent.  
  • Redes de trabajo. La forma en la que se organizan las empresas también cambiará. Actualmente sólo el 38% de las compañías están organizadas en torno a la función de sus colaboradores. Con el auge de los equipos híbridos, se darán cada vez más la configuración de equipos multidisciplinarios y cambiantes orientados a proyectos y no a las funciones de cada miembro.

Trabajar desde casa ha significado para muchos vivir en la oficina, y esto ha tenido diversos efectos en la productividad, en el equilibrio entre vida laboral y personal y en la relación entre empleador y colaboradores. 

Hombre trabajando en casa junto a su hijo

Fuente: Accenture.

A medida que las herramientas y los servicios que facilitan la colaboración de los equipos de trabajo se siguen desarrollando lo que concebimos como trabajo seguirá mutando, así como también lo harán las empresas que continúen su proceso de transformación digital. Para que los equipos del futuro se desempeñen con éxito las compañías deberán adoptar una cultura organizacional que se adapte a las características híbridas del trabajo.