¿Te intriga la historia de la tabla periódica? Si estás aquí es muy probable que ese sea el caso. Aunque parezca uno de esos elementos eternos de todo salón de clases, su invención es relativamente moderna. Pero no hay muchas personas que lo sepan, y es que, aparte de curiosos y profesores de química, la historia de la tabla periódica no es demasiado conocida. Toda una lástima, considerando lo crucial que ha resultado para la historia de la química.
Por eso, nos decidimos a contarte la historia de la tabla periódica de principio a fin, con sus principales períodos y puntos fundamentales. Al finalizar el post, habrás descubierto los fascinantes acontecimientos detrás de la invención de la tabla periódica, y entenderás por qué es tan importante para la química y la ciencia en general.
¿Todo listo para empezar? Abróchate el cinturón y prepara tu plantilla digital para tomar apuntes, pues vamos a hacer un recorrido por la línea de tiempo de la tabla periódica.
No obstante, antes de dar inicio al viaje, empecemos por lo fundamental y veamos qué es la tabla periódica.
¿Qué es la tabla periódica?
La tabla periódica es una tabla que representa y estructura todos los elementos químicos conocidos de acuerdo a su número atómico y otras propiedades químicas.
Puede parecer poca cosa, pero para la ciencia en general, la tabla periódica es un hito del intelecto humano, ya que aglutina todo el conocimiento que se tiene sobre los elementos químicos. Así que no te dejes engañar por su diseño sencillo, detrás de cada detalle y número de la tabla periódica hay un gran descubrimiento científico ¡Imagina todos los que hubo en la historia de la tabla periódica para hacer una tabla tan grande!
Ahora que tienes claro qué es la tabla periódica, podemos empezar nuestro recorrido por la historia y evolución de la tabla periódica.
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La historia de la tabla periódica
La historia de la tabla periódica abarca más de 150 años, y, en todo ese tiempo, numerosos científicos hicieron sus aportes hasta convertirla en lo que es hoy. Y es que la tabla periódica no es el resultado de un trabajo individual, sino de un esfuerzo conjunto por registrar, de manera comprensible y precisa, todos los elementos químicos existentes.
Por eso, para hacer un recorrido por la historia de la tabla periódica, no hay nada mejor que hablar de las contribuciones más cruciales en su desarrollo, junto a algunos de los científicos que los hicieron.
De ahí que, nuestra línea de tiempo de la tabla periódica comienza con el primer paso significativo para el desarrollo de la tabla. Veamos de cuál se trata.
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La tabla de metales de Antoine Lavoisier
Los antecedentes de la tabla periódica se remontan al siglo XVIII, cuando Antoine Lavoisier, considerado el padre de la química moderna, comenzó a clasificar los 33 elementos químicos que descubrió como parte de sus experimentos científicos. Los organizó en metales, no metales, metaloides y metales de transición. Muchos de estos elementos son algunos de los mejores conductores de electricidad, algo que, curiosamente, la mayoría tiene en común.
Antoine Lavoisier sentó las bases sobre las cuales se daría la evolución de la tabla periódica en los años venideros. Y es que su intento por organizar los elementos químicos en una tabla sucinta era uno de los primeros en la historia, al menos el primero de los que se hacían con rigor científico.
Sin embargo, la historia de la tabla periódica apenas daba sus primeros pasos, y la tabla de metales de Lavoisier todavía no tenía la forma o los conocimientos que hacían falta para estructurar los elementos existentes adecuadamente.
La primera tabla periódica y las tríadas químicas de Johann Döbereiner
Unos 40 años más tarde, entre 1817 y 1829, el químico alemán Johann Döbereiner descubrió que ciertos elementos químicos compartían características y propiedades, tanto físicas como químicas. Döbereiner continuó estudiando estas semejanzas, hasta concluir que había un patrón entre las características de varios elementos químicos, una especie de relación en algunos factores.
Así, de acuerdo a los hallazgos de Döbereiner, las masas atómicas del sodio, el litio y el potasio eran muy similares; al igual que las masas atómicas del bromo, el cloro y el yodo. Esta relación se daba siempre entre grupos de tres, de ahí que, los elementos interrelacionados por el patrón fueran conocidos como tríadas químicas.
En consecuencia, Johann Döbereiner intentó organizar todos los elementos químicos conocidos en una especie de tabla periódica, dispuesta en tríadas. Sin embargo, algunos elementos químicos se saltaban el patrón descubierto por el químico alemán.
A pesar de que Döbereiner no consiguió lo que esperaba, sus tríadas químicas supondrían un paso importante en la historia de la tabla periódica, ya que representaron el primer intento por organizar elementos químicos de acuerdo a sus atributos y características.
Por eso, y a diferencia de Lavoisier, esta se considera, por muchos, la primera tabla periódica de la historia, pues no se limitaba a registrar ciertos elementos químicos, sino que trataba de organizarlos descubriendo algún patrón subyacente a todos, el cual permitiera darle orden a la tabla.
La ley de octavas de John Newlands
En 1863, poco más de 30 años después de Döpereiner, John Newlands, un químico analítico inglés, publicó su propia tabla de los elementos, en la que organizaba los 62 elementos químicos descubiertos a la fecha en grupos de ocho.
Para organizarlos, se basó en la llamada ley de octavas, que él mismo ideó, según la cual cada elemento químico tenía semejanzas con otros siete elementos más. De esta forma, existían siempre 8 elementos químicos relacionados entre sí, algo que reflejaban las equivalencias de algunas de sus características. Por eso, la organización de su tabla periódica se hacía en grupos de ocho elementos.
Sin embargo, ni la ley de octavas, ni la tabla periódica propuesta por John Newlands, fueron bien recibidas por la comunidad científica de la época. Pese a todo, los intentos por organizar los elementos químicos seguían impulsando la historia de la tabla periódica.
La tabla periódica de Mendeléyev
Tan solo 5 años luego de que John Newlands publicara su tabla, en 1869, el químico ruso Dimitri Mendeléyev publicaría su propia tabla de los elementos, la cual marcaría definitivamente la historia de la tabla periódica. Mendeléyev organizó los elementos de acuerdo a su masa atómica, y en orden creciente.
Pero, ¿en qué se diferenció del resto? Pues Mendeléyev descubrió que organizando los elementos de esta forma había una especie de patrón de progresión regular en sus atributos. Este hallazgo ofreció el patrón común a todos los elementos químicos que se necesitaba para ordenarlos adecuadamente.
Asimismo, Mendeléyev intuyó que faltaban elementos químicos por ser descubiertos, por lo que dejó espacio en su tabla periódica para ellos. Pero fue más allá, llegó a estimar algunas de las propiedades de esos elementos aún no descubiertos. Lo que no es poca cosa.
Los aportes de Mendeléyev no solo fueron cruciales para la creación de la tabla periódica, sino que influenciaron la trayectoria de la química, y marcaron la historia de la física y la de ciencia en general.
Unas décadas más tarde, entre 1874 y 1885, se descubren nuevos elementos químicos, los cuales tenían propiedades y atributos que se ajustaban a lo previsto por Mendeléyev. En consecuencia, tanto Mendeléyev como su tabla periódica, ganaron todavía más credibilidad en la comunidad científica, como destaca el sitio web especializado en ciencia, ASBMB.
La tabla periódica que usamos en la actualidad, estaba muy cerca.
La invención de la tabla periódica moderna
La historia de la tabla periódica dio un acelerón con la llegada del siglo XX. En 1913, Henry Moseley, un físico y químico inglés, estudió los espectros de rayos X de más de 50 elementos químicos, y al hacerlo, descubrió una correlación entre la longitud de onda de los rayos X y el peso atómico de los elementos. Dicha relación sería conocida en adelante como Ley de Moseley.
Con este hallazgo, la ciencia contaba ahora con una manera factible de medir el peso atómico de los elementos, y en consecuencia, podría organizarse una tabla periódica mucho más precisa que nunca.
Finalmente, Moseley ajustó los elementos químicos de su tabla periódica de acuerdo a sus pesos atómicos y en orden creciente. Esta tabla sería la que llegaría hasta nuestros días. Por lo que podría decirse que tiene al menos unos 100 años entre nosotros.
Puede que a menudo subestimemos su importancia, pero su existencia ha impactado a la ciencia de manera considerable. Solo imagínalo, todos los elementos conocidos, con sus atributos químicos y físicos, están allí. Semejante compendio de descubrimientos no es poca cosa. Por eso el sitio web especializado en ciencia, Sciencing, afirma que:
“La tabla periódica es una de las herramientas más importantes en la historia de la química”.
No podríamos estar más de acuerdo. Quizás nos acostumbramos tanto a verla en los salones de clase que no apreciamos todo lo que significa, y todo el esfuerzo científico que implicó cada etapa de la historia de la tabla periódica. No obstante, puede que con este pequeño recorrido por la línea de tiempo de la tabla periódica quede claro cuán fundamental es para la ciencia.
Y ese ha sido nuestro resumen con las etapas más importantes de la historia de la tabla periódica y su evolución a través de los años, ¿te encantó el paseo tanto como a nosotros?
Si has llegado hasta aquí, seguramente ya tienes claro cuán fundamental es el análisis sistemático. Después de todo, la tabla periódica es el resultado de una investigación meticulosa y organizada. Si tú también quieres aprender a investigar y registrar datos como todo un profesional, amarás el curso online de Excel para principantes, de Julieta Santarelli, data scientist en The Walt Disney Company.
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La historia de la tabla periódica, y el esfuerzo de los científicos detrás de su invención, ya lo deja muy claro: con curiosidad y un sistema de investigación bien definido, ni el cielo es el límite. Por eso, no te detengas y sigue aprendiendo.