Home Blog/ Gestión de Talento/
Gestión de Talento

Aprender los distintos tipos de motivación laboral te será de gran ayuda para poder diseñar estrategias individualizadas y encontrar más caminos para llevar a las personas hacia la mejor versión de sí mismas en el entorno laboral. Ahora bien, ¿cómo puedes lograr este objetivo en tu empresa?

En la actualidad, existen diversas formas de impulsar la motivación en el trabajo, por lo cual es importante conocer las herramientas necesarias para impulsar la productividad y el rendimiento de un equipo de trabajo. Con estos recursos a la mano, sabrás cómo ofrecerle a cada colaborador la motivación que necesita. 

En este post, te enseñaremos cuáles son los tipos de motivación laboral que impulsan a las personas, y en qué se basa cada uno. Como gestor de grupos, es importante conocer las distintas formas de optimizar el rendimiento de tus colaboradores y verás cómo el desempeño de los equipos mejora sustancialmente.

 

Motivación laboral intrínseca 

Comenzaremos abordando la motivación intrínseca, la cual representa uno de los tipos que abordaremos en este post. Entonces, ¿qué elementos abarca esta categorización?

Cuando hablamos sobre la motivación laboral intrínseca, nos referimos a aquella que proviene del propio colaborador. Es decir, este tipo de motivación laboral es personal, individual, y proviene del interior de sus personas, tomando en cuenta sus deseos y sus objetivos, además de vincularse con la satisfacción personal y la automotivación de los individuos.

Si bien existen muchos métodos para llevar a cabo este tipo de motivación laboral, es importante destacar que muy pocos requieren de grandes gastos e inversiones importantes. Al igual que tampoco requieren de mucho tiempo o esfuerzo, por lo que suelen ser una gran opción para mantener fortalecido el espíritu empresarial dentro de tu equipo de trabajo.

Algunos tips que te pueden servir de ayuda son los siguientes:

  • Reconocer el esfuerzo y el tiempo de los colaboradores, que dedicaron su tiempo al cumplimiento de su labor.

  • Aclarar la importancia del trabajo de los colaboradores y explicar el rol que cumplen para alcanzar los objetivos empresariales.

  • Demostrar la confianza que existe entre los individuos, al asignar responsabilidades determinadas o ayudarlos a formar parte de la toma de decisiones de la organización.

  • Ofrecer mayor flexibilidad para que tu equipo pueda trabajar de la forma en la cual se sientan más cómodos (sólo si se trata de maneras razonables).

A continuación, te presentamos algunos de los principales ejemplos de motivación laboral en este ámbito.

1. Motivación de reconocimiento

Este tipo de motivación laboral es considerada tanto intrínseca como extrínseca (la cual veremos más adelante). Si bien tantos los halagos como el reconocimiento representan motivadores intrínsecos, otros elementos pueden ser considerados como motivadores extrínsecos, como por ejemplo:

  • Salarios

  • Bonos

  • Promociones.

La mejor manera de impulsar este tipo de motivación es construyendo espacios de devolución grupal y reconociendo constantemente a las personas por sus logros. Eso sí, no se trata de halagarlos sin razón, sino de ofrecer un reconocimiento real a los colaboradores que hayan hecho méritos suficientes para ello, puesto que pierde valor si se realiza constantemente.

Festejar y reconocer los logros de tus colaboradores no sólo influye en la motivación laboral de las personas reconocidas por sus acciones, sino que también permite que otros individuos del grupo puedan aspirar a obtener un reconocimiento similar.

2. Motivación de actitud

La actitud frente a los desafíos es una cualidad característica de las personas. En este caso, la motivación laboral, que sirve para trabajar mejor, también puede aparecer cuando las personas con este perfil se enfrentan a problemas complejos en los que pueden ponerse a pruebas a si mismos.

Por ello, impulsar a quienes presentan este tipo de motivación laboral implica ofrecerles situaciones donde puedan poner a prueba sus capacidades y evitar actividades cotidianas o repetitivas. Las labores rutinarias suelen ser uno de los principales factores de desmotivación en los entornos profesionales, por lo que es importante mantener un ritmo dinámico para cumplir con los objetivos.

Asimismo, se deben demandar ciertas habilidades por parte de los colaboradores que integran la empresa. Si se trata de un ambiente donde las labores no requieran de ningún tipo de esfuerzo por parte de las personas, también tendrá incidencia negativa en la motivación de los colaboradores, puesto que no se sentirán lo suficientemente exigidos y terminarán ofreciendo el rendimiento mínimo para cumplir con las responsabilidades.

3. Motivación de logros

Similar a la anterior, aunque no se enfoca tanto en el proceso sino en los resultados. Si le preguntas a estas personas “¿cómo tener motivación?”, te responderán que es consiguiendo cosas, alcanzando los objetivos propuestos.

Este tipo de motivación laboral no tiene que ver con grandes objetivos y resultados impresionantes, sino que representa a personas que se sienten bien mientras cumplen con las asignaciones estipuladas.

De esta manera, la mejor manera de motivar a las personas con relación a sus logros es dándoles tareas sencillas y realizables en el corto plazo, para que sientan constantemente que están logrando sus responsabilidades. Así, no bajarán el ritmo y los proyectos empresariales estipulados se podrán consolidar con mayor rapidez.

Para ayudarte a mantener motivados a tus colaboradores, te recomendamos descargar nuestro ebook sobre técnicas de motivación laboral, donde tendrás a la mano los principales recursos necesarios para optimizar la labor de tu equipo de trabajo.

Motivación laboral extrínseca

Dentro de los tipos de motivación laboral, encontramos el tipo extrínseca. A diferencia de la intrínseca, esta se logra con motivación externa: es decir, proviene de afuera del individuo y suele ser ofrecida por líderes y gerentes.

Aunque suelen relacionar este tipo de motivación laboral con recompensas financieras, no necesariamente se valora el aspecto económico. También, pueden referirse a ofrecerle una experiencia agradable a los colaboradores, a través de beneficios como los siguientes:

  • La posibilidad de optar a un mejor puesto de trabajo.

  • Salidas a comer o tener espacios libres durante la jornada laboral.

  • Mayor flexibilidad en las jornadas de trabajo.

  • Mayor cantidad de días libres.

Ahora, si bien la modalidad extrínseca es importante dentro de los tipos de motivación laboral, como se menciona en la Guía de Motivación de HBR, no se puede confiar solamente en la motivación extrínseca. Es necesario combinarla con factores que movilicen los fundamentos de las personas.

A continuación, te presentamos algunos de los principales tipos de motivación laboral extrínseca que pueden existir.

1. Motivación basada en recompensas

Este tipo de motivación laboral está muy de moda en las empresas. Consiste en ofrecerle a las personas recompensas según la cantidad o calidad de su trabajo.

Pese a que pudiera parecer uno de los mejores tipos de motivación laboral que pueden existir, no resulta tan práctico a mediano y largo plazo. Estas recompensas suelen ser de corta duración, puesto que en los entornos laborales actuales no sólo son necesarias las compensaciones monetarias.

Sin embargo, si contamos en la plantilla con personas que están motivadas económicamente o tienen objetivos definidos, la motivación laboral por recompensas será muy útil para ellos.

2. Motivación de competencias

En lo que se refiere a la motivación por competencias, este tipo de dinámica se considera extrínseca ya que es la organización la que la ofrece, aunque está relacionada con los intereses personales del colaborador.

Cuando se habla sobre motivar por competencias se refiere al ofrecimiento de oportunidades de capacitación y desarrollo profesional. Apuntar a la curiosidad y la voluntad de aprender, pero sobre todo, demostrarle a las personas la necesidad de su capacitación para que mejoren su trabajo es una de las mejores formas de impulsar este tipo de motivación laboral.

Según menciona el  portal Forbes, los errores a la hora de plantear programas de motivación son los fallos de correspondencia en los valores corporativos y personales, la desconfianza en la capacidad individual y las emociones disruptivas. Para evitarlos, es importante conocer los diversos tipos de técnicas de motivación laboral.

“A pesar del desarrollo tecnológico, las habilidades más importantes para el trabajo en equipo son las humanas: para liderar con motivación debemos crear conexiones con cada colaborador y darles desafíos que los motiven y los inspiren”, asegura Diego Dalman, tutor de nuestro curso online Técnicas de motivación para equipos

 

Motivación laboral trascendental

Los tipos de motivación laboral, según autores como Juan Antonio Pérez López, se completan con la motivación laboral trascendental. Esta última categorización representa la satisfacción generada en los profesionales, al observar el impacto que sus decisiones y actos tienen en otros individuos. 

Este tipo de motivación laboral combina las perspectivas individuales y grupales. Es decir, las personas se motivan por su contribución, pero también por la sensación de ser parte de algo mayor que funciona, en parte, gracias a su trabajo.

Esencialmente, la motivación laboral viene dada más allá de una remuneración económica. Abarcan razones relacionadas con la obtención de un común, independientemente de que el colaborador forme parte del grupo de trabajo que se pueda ver beneficiado por la toma de decisiones orientadas en este sentido.

Si quieres reforzar este tipo de motivación laboral, algunas de las claves para conseguirlo son las siguientes:

  • Ofrece recompensas grupales, en lugar de que sean individuales.

  • Determina un objetivo grupal que, en caso de que sea alcanzado, contribuya de alguna forma con organizaciones benéficas.

  • Enfoca todas las actividades laborales en favor de los valores y principios empresariales, dejando de lado las acciones que resulten poco éticas.

  • Aclara a tus colaboradores la razón del proyecto que tienes en mente y la forma en la cual tendrá incidencia dentro de su comunidad.

Por ello, para impulsar los efectos positivos de este tipo de motivación laboral, tienes que construir un grupo conectado profesional y socialmente, donde cada individuo reconozca claramente sus responsabilidades y la medida en que su trabajo afecta al desempeño colectivo.

Aplicar los tipos de motivación laboral dentro de tu organización resultará muy beneficioso para alcanzar el máximo potencial de tus colaboradores. Es posible asegurar el mejor desempeño posible gracias a estas pautas, aunque también tiene otras ventajas importantes, como pueden ser las siguientes:

  • Mejorar el employee engagement y la experiencia de los colaboradores.

  • Promover y optimizar la imagen de marca.

  • Crear confianza dentro de tu entorno laboral.

  • Mejorar el rendimiento general de tu empresa.

Ahora, al conocer los tipos de motivación laboral, sabrás mejor qué hacer para que cada persona en tu empresa trabaje feliz y satisfecha. Principalmente, es responsabilidad de los líderes de equipo poder mantener la motivación en la empresa, a través del contacto diario con los colaboradores y la construcción de un ambiente de trabajo motivador y ameno.

Por ende, te recomendamos capacitar a los responsables de tus equipos de trabajo y brindarles los recursos para que mantengan motivados a tus colaboradores. Para ello, te invitamos a descubrir el potencial de nuestras capacitaciones para elevar las habilidades de tu compañía, mediante las herramientas de Gestión y talento que colocamos a tu disposición.

¡Éxitos!