Conocer las etapas de desarrollo de un equipo en las compañías es un aspecto fundamental para poder concretar los proyectos empresariales. Los grupos laborales óptimos han demostrado ser clave para generar los resultados esperados por las organizaciones, por lo que es importante conocer de qué forma vincular a los talentos y asegurar el éxito en el cumplimiento de las tareas.

¿Qué es el desarrollo de equipos? Básicamente, se trata en capacitar a las  personas  para que puedan trabajar juntas y generen  resultados óptimos y de alto impacto en las metas de la empresa. Una vinculación adecuada permite que sea más fácil para los integrantes poder colaborar, mientras que los problemas de conexión derivan en una pérdida de tiempo y esfuerzo en realizar su trabajo.

En este blog post, te enseñaremos las 5 etapas de desarrollo de un equipo de trabajo y cómo el rol del líder resulta vital para que todas las fases se desarrollen de forma armónica y los talentos  puedan contribuir a la creación de un proyecto exitoso. 

Formación

Una de las más importantes etapas de desarrollo de un equipo es, justamente, la primera de ellas. La formación es una fase crucial dentro de la optimización de un grupo laboral, puesto que es cuando los talentos comienzan a conocerse e interactuar entre ellos.

En esta fase de desarrollo, los integrantes del equipo son conscientes de las otras personas, aunque no se ha generado la confianza suficiente entre ellos, por lo que en este punto no se puede pensar en decisiones y la forma de abordarlas. Tampoco existe una buena comunicación entre los colaboradores, lo que conlleva una baja productividad, ya que el grupo aún se encuentra pasando por un proceso de adaptación.

Este paso es muy importante para el cumplimiento de las etapas de desarrollo de un equipo, porque es la primera vez que los colaboradores interactúan y establecen sus límites personales y profesionales. Además, en esta fase, aún son las emociones las que regulan la forma de actuar de los individuos, por lo que será clave ver cómo se desenvuelven y tomar medidas preventivas.

Por ello, el líder es fundamental para la gestión de los equipos de trabajo, puesto que deberá abarcar los siguientes puntos:

• Presentar las metas del proyecto al resto del equipo.

• Permitir que los colaboradores tengan la oportunidad de desempeñarse en un rol concreto.

Para cumplir con estos aspectos, y formar un equipo de trabajo que pueda generar un alto rendimiento, lo ideal es realizar una reunión que sirva de toma de contacto, en la cual los integrantes puedan presentarse y conocerse. La idea es que este encuentro resulte natural y dinámico, ya que será la primera vez que se reúnan los futuros compañeros.

Conflicto/Enfrentamiento

Aunque el nombre de esta fase pueda resultar inquietante para muchos líderes de grupo, esta es una de las etapas de desarrollo de un equipo que ayudarán a su consolidación o contribuirán al quiebre del mismo. En este punto, los talentos no sólo comienzan a trabajar juntos, sino que también están aprendiendo a colaborar entre sí.

Es inevitable que, mientras comienzan las etapas de desarrollo de un equipo y los colaboradores se van conociendo, se produzcan roces y enfrentamientos al momento de realizar el trabajo. Según establece el portal HBR, dentro de los grupos laborales "surgen conflictos, las personas se vuelven demasiado dependientes unas de otras, algunas no reciben su parte justa de crédito; existen numerosos costos de coordinación que se derivan de hacer que los equipos funcionen bien".

Al aplicar las etapas de desarrollo de un equipo, el conflicto puede surgir por muchos factores, como por ejemplo:

• Como respuesta natural ante las opiniones emitidas.

• Por el grado de competitividad que exista dentro del entorno de trabajo.

• Al no estar clara la función que desempeña cada colaborador dentro del proyecto.

Esta etapa de desarrollo de un equipo es crucial, puesto que realmente determinará si el proyecto sigue adelante. Por ende, la figura del líder vuelve a adquirir un rol esencial para encauzar la situación, reconocer el surgimiento de una posible disputa y actuar como ente mediador, en caso de que pueda parecer que el conflicto escale a mayores.

Entonces, ¿qué puede hacer el líder? Si la persona que supervisa el proyecto opta por aplicar una colaboración grupal, podría reducir o contener el impacto que pueda tener esta etapa de desarrollo. Ahora bien, cualquier medida que tome el gerente no impedirá la aparición de alguna discusión, por lo que la clave está en resolverlos, conforme vayan surgiendo, en lugar de querer eliminarlos por completo.

También, son esenciales las habilidades de trabajo en equipo de las personas, ya que si ya algunos de ellos cuentan con cualidades en la colaboración dentro de entornos laborales, los enfrentamientos serán resueltos de forma más simple. Y eso es clave para que las etapas de desarrollo de un equipo puedan continuar desarrollándose de forma natural.

Normalización

Dicen que cuando pasa la tormenta, llega la calma. Y es justo lo que representa esta tercera fase de desarrollo de un equipo. La normalización o normativa ocurre una vez se han superado los conflictos iniciales y los individuos comienzan a alcanzar acuerdos y se conocen un poco mejor.

En esta etapa, los integrantes preparan formas de trabajar que desarrollen el trabajo en equipo. A raíz de esto, comienzan a generarse vínculos en el grupo, dado que van conociendo las fortalezas y debilidades de los otros miembros del equipo.

¿Y cuál es el rol del líder en las etapas de desarrollo de un equipo? En este tercer punto, la participación del supervisor del proyecto pasará a ser la de soporte, puesto que no será necesaria su intervención al nivel de las etapas de desarrollo 1 y 2. La persona que lidera el equipo deberá permitir que los miembros del grupo se encarguen de cumplir con las labores asignadas y limitar su participación, salvo en casos puntuales.

En este sentido, durante esta etapa de desarrollo, se producen las siguientes situaciones:

• Hay mayor comodidad dentro del grupo para el cumplimiento de sus labores.

• Los talentos están abiertos a pedir ayuda para finalizar una asignación o para recibir comentarios constructivos.

• Se incrementa la productividad del equipo de trabajo.

• El grupo será mucho más eficiente y realizará sus labores con mayor eficacia.

Gracias a ello, es en esta fase donde se produce un verdadero desarrollo de equipo. Si bien los inconvenientes pueden continuar, son más fáciles de solucionar al existir un mejor manejo de las emociones entre los integrantes del equipo.

Desempeño

Otra de las etapas de desarrollo de un equipo más importantes es el desempeño. En esta fase, los integrantes  ya mantienen una cohesión entre sí y todos trabajan unidos con la intención de alcanzar los objetivos establecidos, a través de la aplicación de su máximo potencial.

Este es el momento más óptimo dentro de las etapas de desarrollo de un equipo. Durante el transcurso de esta fase, el grupo sigue los flujos de trabajo con normalidad, buscando contribuir a una meta común, ya que son más conscientes tanto de los objetivos estipulados como de su propósito dentro de la agrupación.

Y, una vez más, el rol del líder seguirá siendo el de apoyo y soporte del grupo, principalmente por el grado de autonomía del grupo. La idea de todo supervisor de equipos de trabajo es poder alcanzar esta fase de la forma más rápida posible, superando los inconvenientes que pudieran surgir en el camino y encaminarse a una comunión laboral en pos de una meta conjunta.

Aunque el hecho de llegar a este punto es una victoria para el líder de grupo, la clave está en pasar por las anteriores etapas de desarrollo de un equipo para llegar hasta aquí. La idea es que se pueda llegar a este nivel de forma orgánica, por lo que es ideal que el proceso siga con sus pautas establecidas y todo ocurra de forma natural.

Finalización

También llamada clausura, duelo o disolución, es la última de las etapas de desarrollo de un equipo. Si bien representa el momento en el que un grupo cumple con lo establecido en los objetivos iniciales, culmina sus tareas y procede a desintegrarse, es la fase que menos se explora dentro del modelo.

Es una etapa de desarrollo que cuenta con sentimientos encontrados, ya que si bien los integrantes del equipo de trabajo entran en un estado de bienestar por culminar acertadamente con sus asignaciones, es probable que siga un aura de luto y de vacío. ¿Por qué ocurre? Porque se pierden las amistades hechas durante este proyecto, ya que el vínculo formado y la dinámica grupal fue muy intensa con sus compañeros.

Esta es una de las etapas de desarrollo de un equipo más delicadas, pues es posible que a los integrantes les cueste volver a trabajar con otros grupos de trabajo. Aquí, vuelve a ser clave el rol del líder, quien deberá ayudar a que el duelo pase lo más pronto posible y evitar cualquier posible apego con el equipo anterior.

¿Qué puede hacer el líder del proyecto al concluir las etapas de desarrollo de un equipo? Algunas de las acciones de cierre que puede realizar son las siguientes:

• Celebrar con el equipo el cumplimiento de las etapas de desarrollo de un equipo y los logros alcanzados durante este período.

• Reflexionar con los colaboradores acerca de las metas logradas y recordar la razón por la cual todos están cumpliendo con sus funciones.

• Elogiar y reconocer los talentos de cada integrante del equipo de trabajo.

En este punto, con el proyecto culminado, es momento de realizar las evaluaciones pertinentes y determinar el éxito o fracaso de aplicar las etapas de desarrollo de un equipo. Para evaluar el grado de productividad de tu equipo de trabajo, te presentamos este ejemplo de informe de productividad en formato Excel, por medio del cual podrás tomar las mejores decisiones y aplicar alternativas para optimizar este apartado.

Informe de productividad de Crehana

Conocer las etapas de desarrollo de un equipo es clave para que un proyecto culmine adecuadamente. En este sentido, el liderazgo es clave en obtener resultados, pues será la guía para que los colaboradores puedan cumplir con sus asignaciones, y evolucionar a nivel profesional. Como bien señala el medio Forbes, una de tus principales tareas de un líder “es facilitar el crecimiento de tu equipo y contribuir al desarrollo del potencial de tus colaboradores".

¿De qué forma se puede guiar el desarrollo de un equipo de trabajo? Cumpliendo con los siguientes apartados:

• Determina el objetivo principal de tu equipo de trabajo con antelación, así como también los roles de cada miembro.

• Establece un plan de comunicación eficiente.

• Enfócate en las fortalezas de cada integrante del grupo.

• Busca abordar los enfrentamientos de forma asertiva.

• Mantén un liderazgo firme e impulsa a tu grupo para el alcance de sus metas.

Con estos puntos cubiertos, podrás cumplir con el desarrollo de tu equipo de trabajo y mejorar el rendimiento empresarial.

Las empresas que han dedicado tiempo y esfuerzo para cumplir con las etapas de desarrollo de un equipo. Por ello, a través de la evaluación de su funcionamiento y la expansión de sus cualidades, han conseguido mantener talentos comprometidos con sus labores y convierten grupos de trabajo en equipos de alto rendimiento. 

Si se trabaja en conjunto, apostando por la fortalezas de cada integrante y existe comunicación y unión, no sólo se verá reforzada la productividad, sino también el crecimiento y la motivación. Y esto es fundamental para desarrollar las etapas de desarrollo de un equipo de forma óptima en las organizaciones.

Estas son las etapas de desarrollo de un equipo. Si quieres generar grupos de alto impacto, que alcancen objetivos eficazmente e impulsen la evolución de la empresa, este es el paso a paso a seguir, contando con liderazgos adecuados que permitan que el proceso se genere de manera orgánica y natural.

¡Éxitos!