Ser parte de la cultura del emprendimiento actual tiene muchísimos retos, pero también algunas ventajas. Entre las principales está el hecho de que la mayor parte de tu público objetivo seguramente está en internet, esperando con ansias encontrar ese producto o servicio que tienes para ofrecer. En este punto debemos ir con cuidado, no nos apresuremos a pensar que existe un solo internet: necesitamos encontrar el o los canales correctos, además de los contenidos correctos. ¿Quieres saber más?
Primero lo primero. Tal vez has escuchado innumerables veces el término “content marketing” o “marketing de contenidos”. Pero qué es, cómo funciona y más importante ¿cómo lo ejecuto correctamente?
El marketing de contenidos: oro molido
El marketing de contenidos se refiere a todo lo que podemos encontrar en el mundo online, tal como: artículos de blog, comunicados de prensas, posts en redes sociales, newsletters, campañas de email, videos e imágenes. Es decir, todo aquello que se publica con el único propósito de conectar y establecer un engagement con tu target.
Se trata de información bien pensada y relevante que agrega valor a quienes la consumen y a cambio, le brinda exposición a tu marca. Claramente las empresas no publican distintas clases de contenido solo por hacerlo, sino que su fin es interactuar, generar conexión con las personas y dejar a tu audiencia con ganas de aprender más.
Además, la tendencia de empresas B2B que tienen estrategias de marketing digital efectivas es cada vez mayor.
¿Por qué el marketing digital se ha vuelto tan relevante?
Actualmente ya nadie quiere a alguien diciéndole qué tiene que comprar. Ahora de lo que se trata es de poner toda la información a la mano que hable de ti, quién eres, cuál es tu perspectiva y por qué deberían elegirte por encima de otros. Ahí está el secreto, mientras más valor otorgues a quienes reciben tu información, ganarás un mejor lugar y estarás más cerca de convertirte en una autoridad.
¿Cómo comienzas a crear un plan o una estrategia?
Sin duda hay algunas claves que harán que tu estrategia sea más o menos exitosa. Lo primero es tener claro la audiencia a la que te vas a dirigir, tu target. De esta forma podrás identificar quiénes son, qué les gusta, cuáles son sus intereses.
Luego, en un segundo momento podrás identificar cómo escribir para esa audiencia y podrás elegir temas que busquen resolver sus necesidades.
Después, valdría la pena identificar dónde les gusta pasar más tiempo. ¿Prefieren Facebook, Instagram o probablemente LinkedIn? ¿Qué clase de publicaciones son sus favoritas, tal vez un carrusel imágenes con explicaciones breves sobre la importancia de algún tema particular, una nota de blog o un video?
Supongamos que lo que tú vendes son estrategias de SEO para empresas, probablemente el lugar donde encuentres a la gente que buscas es LinkedIn, aunque Facebook o Instagram también podrían ser interesantes. Todo dependerá del tipo de empresas que estés buscando y aunque encuentres que tu público puede estar en una red o en otra, lo cierto es que deberás buscar distintos contenidos para cada una.
¿Tienes claro por qué haces lo que haces?
Seamos francos, cuando en la vida cotidiana hacemos algo sin estar muy seguros porque o solo “porque está de moda” al final puede no resultar tan bien. Piensa en esa ocasión que te compraste alguna prenda de ropa porque la habías visto en todas las revistas y al final no te quedó nada bien o cuando creíste que podrías ir a correr todas las mañanas solo porque no parecía tan difícil.
Te aseguro que todo tendrá un mejor resultado si tienes un propósito claro y si puedes cuantificar los resultados que estás obteniendo, claro (¿si no de qué otra cosa se trata la era digital?) Estarás pensando “esto suena genial, pero ¿como aclaro mi propósito?”
Un buen comienzo puede ser responder a estas preguntas, incluso puedes valerte de la ayuda de otros colaboradores o de gente que haya estado en contacto con tu producto o con lo que estás planeando hacer:
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¿Cuáles son tus metas?
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¿Cuál es tu tema?
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¿Cómo vas a medir que las acciones que emprendas estén dando los resultados esperados?
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¿Qué tanto esperas depender de los medios sociales?
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¿Cómo te vas a asegurar que tus contenidos sean fáciles de compartir?
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¿Vas a buscar escribir como invitado en otros blogs o prefieres postear directamente en el tuyo?
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¿Planeas enviar un newsletter de manera periódica?
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¿Quién se va a ocupar de hacer la curación de contenido y la distribución?
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¿Qué métodos para marketing de contenido vas a probar primero?
Crea un calendario
Antes de que comiences a abrumarte con hacer alguna investigación un poco más profunda para responder estas preguntas y luego comenzar a implementar las acciones que te permitirán tener la estrategia de marketing de contenidos más esperada una buena idea es hacer un calendario. Así podrás incluir qué tan frecuentemente se va a publicar, en qué plataformas, si se van a curar contenidos provenientes de otros sitios. Además podrás tener claro si necesitarás de alguna herramienta o información adicional para llevar a cabo dicha planeación.
¿Qué necesitan tener los contenidos que vas a sacar?
Nadie puede negar que la apariencia es sumamente importante y cuando se trata de presentar tus contenidos, hay algunas buenas prácticas que te sugerimos:
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El texto debe estar bien espaciado y que esté dividido en fragmentos cortos que estén precedidos por un encabezado.
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fuente y color de texto tendrán que ser complementarios, sin ser demasiado contrastes entre ellos.
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Las imágenes tendrán que ser relevantes, claras y tendrán que hacer que tu prospecto quiera aprender más.
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Los videos deberán ser profesionales y ajustarse al tono que quieras comunicar: divertido, informativo y creativo.
Por último y no menos importante: confía en un profesional y, de ser posible, en un equipo. Probablemente tu hará de expertise sea el content marketing, en ese caso probablemente necesitarás a alguien que te ayude a ejecutar todo correctamente, al menos mientras todo comienza a crecer.
Ahora que si no es tu área definitivamente tienes que recurrir a alguien que tenga experiencia y pueda sugerirte acciones que resulten relevantes para tu audiencia.