El ciclo de vida del empleado es la ruta que debería explorar con atención el equipo de Recursos Humanos en cualquier empresa. No solo revela datos sobre las motivaciones y el desempeño de una persona en su puesto de trabajo, también evidencia sus puntos débiles y aspectos a mejorar.
Por otro lado, organizar el ciclo de vida laboral le permite al equipo de HR hacer un feedback inmediato sobre el funcionamiento de la organización para asegurar el cumplimiento de los objetivos. De este modo, será posible mejorar la gestión del talento humano y sus resultados.
Para ayudarte con ello, a continuación, te explicaremos en qué consiste el ciclo de vida laboral: qué es, por qué es importante y cuáles son sus etapas clave.
¿Qué es el ciclo de vida del empleado?
Marina Christin y Claudina Restaino, profesoras de nuestro curso de HR Employee Experience, definen el concepto como el ciclo en el que participa todo colaborador que se une a la organización, desde que ingresa hasta que termina su contrato o decide finalizar su estancia en la empresa.
Entre las etapas más importantes del ciclo de vida del empleado, están las siguientes:
- Atracción
- Reclutamiento
- Onboarding
- Desarrollo del empleado
- Retención
- Offboarding
El ciclo del empleado en una empresa permite valorar impactos, problemas, oportunidades y dinámicas durante su tiempo de permanencia en la organización. Además, cada etapa trae sus propios retos y dificultades. El reto de los líderes es reconocer que todas son cruciales para mantener a los empleados felices y comprometidos con la misión y visión.
Sobre todo si tenemos en cuenta que el nivel de satisfacción y motivación del grupo impacta directamente en la productividad y eficiencia, supervisar el ciclo de vida laboral es crucial para asegurar el cumplimiento de los estamentos de la empresa desde el día 1.
¿Por qué es importante el ciclo de vida del trabajador?
De seguro te estás preguntando cómo se vincula el ciclo de vida del empleado con la estrategia de la compañía. Como se puede deducir de la definición, tener un mapa del viaje del empleado en la empresa posibilita sacar conclusiones valiosas, lo cual nos ayuda a corregir, mejorar y potenciar procesos. Pero hay mucho más.
A continuación, te explicamos otras ventajas de conocer el ciclo de vida del empleado.
1. Aumenta el employee engagement
Según un artículo de Haiilo, el 71% de ejecutivos consideran que el employee engagement es crucial para el éxito de una compañía. Cuando un equipo está comprometido, el ausentismo se reduce en un 40% y la empresa se vuelve 21% más rentable.
Tener una estrategia respecto al ciclo de vida del empleado permite a los líderes mejorar las expectativas sobre el trabajo y brindar mayores oportunidades de crecimiento profesional. Esto puede ocurrir, por ejemplo, en las etapas de onboarding y de desarrollo. De esa manera, los colaboradores se sentirán más motivados y conectados a su trabajo diario.
2. Fortalece la cultura organizacional
Entender cómo funciona el ciclo de vida del empleado genera información valiosa para lograr la cultura laboral deseada. La interacción y la calidad de las relaciones que forma el empleado en cada etapa son oportunidades para demostrar al equipo que es parte de una organización que se preocupa tanto por su experiencia humana como profesional.
Reconocer y entender el ciclo de vida del empleado es útil para asegurar un buen clima laboral, motivar al equipo durante toda su estadía en la empresa, atraer a los mejores talentos a futuro y potenciar las utilidades.
3. Promueve la cohesión e integración en equipos
La gestión del ciclo de vida laboral del empleado en una organización forma parte del trabajo de Recursos Humanos. Al hacer un seguimiento del empleado en las diferentes etapas de su recorrido, es posible mejorar su experiencia con otras áreas o grupos.
Para ello, el team de HR deberá coordinar con los otros líderes cómo será el contacto entre sus colaboradores. Por ejemplo, si se trata de un desarrollador de software, el equipo debería dedicar tiempo a definir la interacción entre el empleado y las áreas en las que se requiere su participación (finanzas, diseño, HR, etc). Esto con el fin de que ambas partes puedan entenderse, aprovechar el tiempo y obtener buenos resultados.
Etapas del ciclo de vida del empleado
El ciclo de vida del empleado, en total, tiene 6 etapas. Cada una de ellas debe considerarse para armar una buena estrategia de gestión de personal, especialmente si el objetivo es mantener un equipo comprometido y motivado a largo plazo.
En las siguientes líneas, te explicaremos en qué consisten las fases del ciclo de vida de un trabajador:
1. Atracción
La primera etapa del ciclo de vida del empleado ocurre antes de que empiece a trabajar en la empresa. El objetivo es que el futuro colaborador vea a la empresa como el lugar ideal para desarrollarse profesionalmente. Esto implica el reconocimiento de los valores, condiciones de trabajo y beneficios que caracterizan a la empresa.
Por eso, las organizaciones deben desarrollar su reputación y hacer una proyección de marca atractiva, de manera que aquellas personas que cumplan con el perfil del candidato ideal tengan en mente sumarse a ellas eventualmente.
Te recomendamos implementar las siguientes estrategias en esta etapa:
- Incrementar el brand awareness de la marca entre futuros candidatos.
- Promover la cultura corporativa por los canales de la empresa.
- Ofrecer beneficios atractivos y compensaciones.
- Lograr que los empleados compartan –por su cuenta– su experiencia en la empresa y que también la recomienden.
2. Reclutamiento
El proceso de reclutamiento de personal es la segunda fase del ciclo de vida del empleado. Implica todos los pasos tomados para contratar a una persona. Va desde el anuncio con la oferta de trabajo hasta la comunicación de su aceptación.
En cada uno de estos momentos deberás potenciar la experiencia del empleado con aportes que favorezcan su relación con la marca. Te dejamos algunas recomendaciones para tener buenos resultados durante esta etapa del ciclo de vida laboral:
- Obtén referencias de los equipos que forman parte de la empresa.
- Diversifica y distribuye la oferta laboral en distintas plataformas.
- Diseña una oferta laboral que refleje muy bien el perfil buscado.
- Conduce entrevistas de selección que permitan valorar virtudes y potencialidades en un candidato.
¿Quieres saber más al respecto? En nuestra guía de reclutamiento y selección de personal te contamos de forma detallada qué pasos tener en cuenta para asegurar la contratación de tu candidate persona.
3. Onboarding
Una investigación del Brandon Hall Group, citada en el blog de Sampling, muestra que las organizaciones con sólidos procesos de onboarding mejoran la tasa de retención de talento hasta en un 82%.
Por ello, entre las etapas laborales del ciclo de un empleado, el onboarding es fundamental para que los colaboradores se familiaricen con los procesos, las tareas y los equipos.
Es conveniente que sepas organizar los trainings suficientes y específicos para su integración, de manera que se sientan parte de una organización seria y ordenada desde el principio. Aquí tienes unos consejos útiles para realizar el proceso de onboarding:
- Comunica la misión, valores y políticas laborales de la empresa.
- Describe las expectativas que tiene la empresa sobre el trabajo del empleado.
- Monitorea y brinda soporte a la persona contratada de manera personalizada.
- Crea las capacitaciones de manera concisa y con información útil para que inicie su trabajo.
Con el tiempo, te recomendamos monitorear los avances del equipo con una herramienta de evaluación de desempeño que te permita conocer sus avances, áreas de oportunidad y debilidades, para así dar un buen feedback cuando sea necesario.
Las plataformas como Crehana cuentan con funciones diseñadas para simplificar este proceso significativamente y, sobre todo, para ayudarte a tomar mejores decisiones a lo largo del ciclo de vida del empleado.
4. Desarrollo profesional
En el mapa del viaje del empleado, velar por su aprendizaje continuo asegura una contribución a su desarrollo profesional. La mejor forma de hacerlo es a través de capacitaciones internas, que promuevan el incremento de sus habilidades técnicas y blandas. Sin embargo, también es recomendable motivarlos a continuar su crecimiento profesional con credenciales y entrenamiento externo.
Aparte de ello, la etapa del desarrollo profesional en el ciclo de vida laboral implica fomentar la satisfacción laboral del empleado, su productividad y la buena relación con los equipos de trabajo. Estos son algunos consejos para lograr el desarrollo del talento de tu empresa:
- Haz un seguimiento continuo del rendimiento laboral de los empleados.
- Ofrece feedback constructivo y a tiempo.
- Mide las capacidades y destrezas de manera personalizada.
- Premia los aprendizajes y las capacitaciones cumplidas.
Al igual que en la etapa anterior, para promover el crecimiento profesional es igual de importante contar con una plataforma de desarrollo de equipos para cuidar el ciclo de vida del talento humano.
En Crehana, hemos diseñado el espacio ideal para lograr tus objetivos: centraliza todos los recursos de capacitación, accede a más de 1,200 cursos, obtén mentoría personalizada, crea y sube contenido propio y mucho más.
5. Retención
La retención de talento es uno de los retos más difíciles de gestionar para una empresa, pero, si se hace correctamente, será uno de los logros más importantes de cara al éxito de la compañía.
En esta fase del ciclo de vida del empleado, te debes preocupar por retener a los profesionales que suman valor a tu compañía. Para ello, la empresa necesita desarrollar una cultura organizacional sana que mantenga contento y motivado al empleado en el rol que cumple. Sigue estas recomendaciones para lograr ese resultado:
- Perfecciona tus procesos de reclutamiento para contratar al mejor talento.
- Fortalece las dinámicas y la integración de los equipos.
- Promueve el feedback por parte de los empleados de manera estratégica.
- Conoce las motivaciones y expectativas de los empleados.
Por supuesto, todos estos tips serán más fáciles de llevar a cabo en una plataforma de clima laboral como la de Crehana. En ella, encontrarás las herramientas que necesitas para gestionar la cultura interna y asegurar la satisfacción del equipo.
Nuestro objetivo es promover el reconocimiento laboral y dar visibilidad a las necesidades del equipo para que puedas tomar mejores decisiones.
6. Salida
Como todo ciclo, la vida laboral de un empleado también tiene un fin, el cual puede llegar por motivos personales o profesionales. Aunque parezca que no hay ninguna acción que tomar, es imprescindible la comunicación final con transparencia para entender los motivos de la partida.
De hecho, terminar en buenos términos el vínculo laboral es síntoma de que la empresa está haciendo una gestión saludable del talento. Además, si el empleado abandona la empresa satisfecho de su trabajo y contento con las relaciones forjadas, será un embajador más de la marca.
Aquello es clave para seguir atrayendo personas a la empresa (primera etapa del ciclo del colaborador). Recuerda que es más sencillo y económico reclutar a personas de forma orgánica, que iniciar un proceso de selección desde cero. Claro que, si es posible, lo mejor es retener al talento y evitar salidas espontáneas.
Hay que priorizar las motivaciones e intereses del equipo al armar el ciclo del colaborador en función a lo que ellos necesitan, para así estimular su compromiso y lograr retenerlos a largo plazo.