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Reclutamiento & Contratación

Suele ocurrir que asociamos a las personas tóxicas con alguna de nuestras exparejas o compañeros de trabajo que no eran buenas influencias. Pero este concepto va más allá de esto, en realidad la personalidad tóxica la encuentras en el familiar que dice un comentario irónico ante cada uno de tus logros o en ese amigo de toda la vida que suele ser el primero en criticarte y el último en felicitarte.

En ocasiones, tener que lidiar constantemente con ese tipo de personas tóxicas y manipuladoras se convierte en algo tan desgastante. Incluso, puede ocurrir que ni siquiera te des cuenta que estás tratando con una persona tóxica hasta que es demasiado tarde. Por esta razón, estamos aquí para abrirte los ojos de una vez.

En este blog post aprenderás cómo son las personas tóxicas y las características más comunes de estas personalidades. Además, conocerás cómo identificar a una persona tóxica y la forma de actuar ante ellas. Cuando termines de leer esta nota, sabrás cómo lidiar con personas tóxicas en tu día a día.

¿Qué son las personas tóxicas?

Las personas tóxicas son aquellas que afectan negativamente, de forma directa o indirecta, a sus más allegados. Todo esto con base en una personalidad narcisista y egocéntrica. Nos referimos a esos seres que se levantan todos los días con ganas de ver el mundo arder. Y si te preguntas si es posible que estés conviviendo con una persona tóxica y no te des cuenta... sí, es muy posible.

Una persona tóxica puede ser algún amigo inseparable, un familiar y sí, también tu pareja. De modo que debes estar atento a las señales que emita la persona que esté a tu lado y saber reconocer estas características "radiactivas" que no habías notado antes.

Pensamiento tóxico

Como te mencionamos antes, las personas tóxicas se ven definidas por su comportamiento diario, por su rutina y su incidencia en la vida de quienes están a su alrededor. Por esta razón, un mal pensamiento aislado no significa nada. Como bien menciona el portal web Medium, una persona tóxica se manifiesta "las 24 horas del día y los 7 días de la semana", afectando tanto a su entorno como a sí mismo.

¿Nunca te ha venido a la mente un pensamiento negativo que después te dices a ti mismo: "no debí pensar eso"? Es muy común que estos pensamientos aparezcan de repente, por lo que cuando se te ocurre algún pensamiento tóxico en tu vida diaria, lo asocias con maldad. Pero no es tan cierto como parece.

Tener un mal pensamiento no te convierte en una persona tóxica. Tampoco te convierte en una mala persona (que, muchas veces, solemos relacionar el ser tóxico con ser malo), ya que este tipo de pensamiento puede surgir sin motivo ni razón y eso no implica que tu esencia se basa netamente en eso.

 

Características de las personas tóxicas

Si piensas que una persona tóxica es aquella que te revisa el celular cuando no estás pendiente de ella o que te vive preguntando con quién frecuentas todo el tiempo. Bueno, la definición de persona tóxica abarca mucho más que estos rasgos de personalidad.

Estas son conductas relacionadas con inseguridades, pero no es exclusivo de personalidades tóxicas. Según explica Adriana González, profesora del  curso online de Gestión y trabajo con personas difíciles, el sujeto tóxico "es una mezcla de arquetipos", como pueden ser los siguientes: 

1. Falta de empatía 

Uno de los rasgos de una persona tóxica común (y muy frecuente) es la falta absoluta de empatía. Es un hecho que los perfiles que encajan con esta clase de conductas les suele encantar el saboteo de autoestima, sin considerar cuánto pueden afectar al otro.

Esta clase de personas no son conscientes del efecto que tienen sus palabras y acciones sobre los demás. No solo no saben cómo ser empático y lo que es ponerse en el papel de los otros, sino también no tienen ninguna intención de hacerlo en primer lugar. La única sensación desagradable que pueden sentir las personas tóxicas es si algo les afecta a ellos directamente, lo que se ve exponenciado por su conducta narcisista.

mujer mirando con envidia a su amigaFuente: Pexels

2. Negatividad hacia el entorno

Para las personas tóxicas todo es negro (o a lo sumo, un gris muy oscuro). No suelen alegrarse por los logros de los demás, ni tampoco recibirás palabras de aliento en situaciones complicadas. Para ellas, "todo está mal".

No solo será el factor que incomode tu éxito, sino también el primero que hablará apenas sienta que estás al borde del fracaso, para ahondar en esa herida. Y créenos, aunque cualquiera se alejaría de alguien así, es muy curioso que este tipo de conducta no la percibas con tanta facilidad.

Son muchas las ocasiones en las que la negatividad de una persona te confunde y su negatividad te absorbe. Al límite de que puedes empezar a ver las cosas bajo la misma óptica de esta persona tóxica, así que lo mejor es que comiences a correr.

persona gritando frente al teléfonoFuente: Unsplash

3. Egocentrismo

Como te mencionamos en el punto relacionado con la falta de empatía, un rasgo básico y fundamental que encontramos en las personas tóxicas es que son seres terriblemente egocéntricos. El universo orbita alrededor de ellos mismos, siendo el centro de todo tipo de atención (o, al menos, querer serlo).

De hecho, tienen una necesidad profunda de ser atendidos y tomados en cuenta. Incluso, hasta el extremo de querer ser venerados por su entorno, lo que ya te dice que las cosas deben estar muy mal para llegar a ese nivel de narcisismo. Una cosa es ser vanidoso por momentos y otra es ser egocéntrico las 24 horas del día.

persona tóxica y egocéntricaFuente: Pexels

4. Manipulación a las demás personas

De acuerdo a su conveniencia, una persona tóxica es capaz de convencer a las personas que lo rodean de hacer lo que desee. Y encima, es capaz de adoptar diversos roles para ello.

Hay ciertas personas tóxicas que buscan engañar mediante la astucia y el poder de seducción que puedan tener sobre el otro, solo para que esta persona desarrolle su capricho. Otros prefieren un estilo más defensivo, en el que asumen la postura de víctimas, con la idea de ser el centro de atención y que se ejecuten sus designios. 

No importa cuál de los estilos se desarrollen, es muy probable que, si caes en esta trampa, tengas que ceder todos tus recursos y energías a esta persona tóxica. Lo que a la larga será contraproducente, tanto para ti como para tu familia y tu entorno.

hombre manipulando a su amigoFuente: Pexels

5. Inestabilidad y destrucción

La destrucción e inestabilidad no solo se refiere al entorno de esta persona, sino también a sí mismo. Las personas con actitudes tóxicas no son felices. Básicamente, las personas tóxicas carecen de inteligencia emocional. No entienden lo que es la responsabilidad de sus actos y los efectos de estos, así como tampoco saben cómo canalizar emociones, como la frustración, la envidia, la ira o la tristeza.

Es decir, no poseen esta clase de actitudes, por lo que te recomendamos que evites que las personas que no cuentan con la debida inteligencia emocional tengan algún impacto sobre ti y los tuyos, ya que esto podría repercutir en consecuencias inadecuadas para ti. 

Así que presta atención, especialmente en el ámbito laboral, ya que encontrarte con personas tóxicas en el trabajo solo puede derivar en problemas, puesto que esta persona siempre pensará en el beneficio personal y muy poco en el colectivo. 

Por eso, debes tener cuidado al respecto e identificar a personas tóxicas. Y, para ello, estamos nosotros: para alejar cualquier espectro negativo de tu vida (o que, al menos, tengas las herramientas para combatirlo).

¿Cómo identificar a una persona tóxica?

La profesora González ofrece algunos lineamientos que te permitirá identificar a las personas tóxicas. Algunas de las señales de alerta a las que debes estar atento son las siguientes:

  • No escuchan.

  • Menosprecian a los otros.

  • Descartan ideas que vengan de los demás.

  • No les gusta enseñar o capacitar.

  • Se frustran fácilmente.

  • No aceptan culpas.

Adicionalmente, el medio especializado Entrepreneur, permite vislumbrar algunos rasgos de conductas y actitudes que tienen las personas tóxicas, asociados principalmente a:

  • La arrogancia.

  • La necesidad de control.

  • La mentira y el chisme.

Esta clase de señales revela dos cosas: primero, esta persona no te va a traer ningún bien a tu vida. Y segundo, debes alejarte y buscar personas en tu vida que te sumen, en lugar de restarte.

Y sí, sean familia, amigos o parejas. Nada bueno ocurre cuando te dejas absorber por una persona tóxica. Para evitar que te hundas en estas arenas movedizas, en la siguiente sección te traemos las mejores formas de cómo lidiar con personas tóxicas.

 

Tipos de personas tóxicas

Si bien puedes identificar personas tóxicas con ciertas actitudes y comportamientos específicos, es probable que no sepas con qué tipo de personalidad estás enfrentando. Por eso, a continuación, te compartiremos los diferentes tipos de personas tóxicas existentes:

1. El narcisista conversacional

¿Alguna vez has estado hablando con alguien que te interrumpía a cada rato? ¿O tal vez has estado tratando de hablar con alguien que no te deja decir una palabra? A los narcisistas conversacionales les encanta hablar de sí mismos, o simplemente escucharse hablar. 

Básicamente, estas personas tóxicas no te hacen preguntas, no esperan tus respuestas y no se callan. En una relación, estos sujetos terminan siendo completamente egocéntricos y nunca están atentos a tus necesidades.

2. La “camisa de fuerza”

La “camisa de fuerza” es alguien que quiere controlar todo y a todos a su alrededor. Quieren estar a cargo de lo que haces, de lo que dices e incluso de lo que piensas.

Es la persona que se asusta cuando no estás de acuerdo con ella y no deja de intentar convencerte de que tiene razón y que debes hacer lo que dice. En una relación, esta persona tóxica no te dará espacio para respirar y te regañará constantemente hasta que estés completamente alineado con ella. 

Ten cuidado, estas personas irán tras tu libertad emocional y mental hasta que no te quede nada. ¡Evita este tipo de personas tóxicas mientras puedas!

3. El “vampiro emocional”

Un “vampiro emocional”, también conocido como un "vampiro espiritual", tiende a absorber la positividad de ti o te "desangra" emocionalmente. Estas son las personas tóxicas que siempre tienen algo triste, negativo o pesimista que decir. 

En conversaciones y relaciones, nunca pueden ver lo positivo y tienden a derribar a todos con ellos. Si estás con alguien y solo tiene cosas malas que decir cada vez que lo ves, ten cuidado; puede que no mejore.

4. El dramático

Aunque no lo creas, algunas personas son imanes para el drama. Para ellas, siempre hay algo malo. Y por supuesto, una vez que se resuelve un problema, surge otro. De hecho, solo quieren tu atención y apoyo, pero no tus consejos. Si les brindas soluciones, estas personas solo escucharán y, simplemente, evitarán arreglar el problema.

En una relación amical, laboral o de pareja, este tipo de personas tóxicas actúan como víctimas y prosperan en una crisis, porque los hace sentir importantes. Si alguien es un imán para la adversidad, ten cuidado, algún día podrías convertirte en parte del drama.

5. El crítico

Ser una persona crítica tiene sus beneficios, especialmente cuando brinda comentarios positivos para la otra persona. En cambio, las personas tóxicas con este tipo de rasgo, por lo general, se manifiestan con juicios, críticas o chismes. 

Según ellos, todos los demás son desagradables o carecen de alguna manera. Si alguien comienza a hablar mal sobre otras personas, cuidado, puede ser una persona tóxica, y nunca sabes lo que puede decir de ti a tus espaldas.

6. El “tanque”

Como sabrás, un tanque aplasta todo a su paso. Si este concepto lo trasladamos al lado humano, una persona “tanque” siempre quiere llevar a todos contra viento y marea. Básicamente, son personas tóxicas que siempre quieren tener la razón, no tienen en cuenta los sentimientos o las ideas de los demás y se ponen constantemente en primer lugar. 

En una relación interpersonal, estos tipos de personas tóxicas son arrogantes y ven sus opiniones personales como hechos. Esto se debe a que a menudo piensan que son las personas más inteligentes, por lo que ven cada conversación y cada individuo como un desafío que deben superar. 

Rara vez ven a los demás como iguales, y esto puede ser un reto cuando se trata de formar un tipo de conexión. Si sientes que tus ideas no están siendo respetadas, ¡corre mientras puedas!

7. El mentiroso

Bueno, de este tipo de persona tóxica no hay mucho que decir, pues es evidente que se caracteriza por decir pequeñas falsedades o grandes mentiras. La deshonestidad es una acción que cansa, porque estás constantemente dudando de las palabras de estas personas. 

Si tu intuición está haciendo sonar las alarmas, entonces ten cuidado; evita a este tipo de personas tóxicas en tu vida. Lo único que harán es decir una mentira tras otra hasta conseguir su objetivo.

persona tóxica esparciendo un rumorFuente: Unsplash

¿Cómo actuar frente a una persona tóxica?

Por fin, sabes cómo detectar personas tóxicas. Ahora, ¿qué pasa si debes aprender a lidiar con ellas? No te preocupes, basta con que tomes ciertas posturas y actitudes que te sirvan para que la influencia de estas personas tóxicas no termine afectando tu paz mental y tu bienestar emocional.

Bien, algunas de las acciones que puedes tomar frente a una persona tóxica son las siguientes:

1. Aprende a decir que no

No solo es importante respetar a todos, sino también debes aprender a hacerte respetar. Y, justamente, una persona tóxica buscará traspasar límites constantemente. 

Por este motivo, con las personas tóxicas debes establecer los límites desde el primer momento y marcar ciertas líneas que no estés dispuesto a permitir que la otra persona las cruce. Y si lo hace, debes ser firme, demuéstrale tu incomodidad y lo más importante de todo: no debes sentirte culpable por eso.

2. Evita interiorizar el problema de forma personal

Otro aspecto muy importante para tratar con personas tóxicas es que no tomes como algo personal su comportamiento. Con este argumento, no te estamos diciendo que perdones conductas y actitudes. Por el contrario, el que tiene el problema es esa persona y no puedes dejar que sus acciones te afecten o te perturben.

3. Aplica la compasión

¿Recuerdas la frase de "poner la otra mejilla"? No te decimos que recibas todo los golpes sin intercambiarlos, pero te recomendamos que intentes desarrollar sentimientos compasivos hacia esas personas tóxicas.

Siempre que nos atacan, nuestra percepción toma al otro como "el enemigo", lo que da pie a una serie de sentimientos negativos hacia la persona. Pero desarrollando pensamientos de compasión, quizá su conducta y energía te afecten muchísimo menos que si decidieras contraatacar su afrenta.

4. No caigas en su juego

Lo peor que podrías hacer frente a las personas tóxicas es tomar una actitud similar a ellas. Una cosa es que te defiendas de todos los ataques que recibas y otra muy distinta es que te plantees tomar la misma actitud que esta persona.

Si desciendes a su nivel, habrá ganado. Si te mantienes con tu esencia, tus argumentos y tu forma de ser inalterables, la victoria será tuya.

5. Habla con ellos sobre su comportamiento

Alguien que manipula a los demás o crea situaciones dramáticas sin darse cuenta de cómo su actitud afecta a otra persona, una conversación abierta puede ayudarlos a entender de que este comportamiento es inaceptable.

Para mantener las cosas neutrales, trata de incluir la palabra "yo" en tus declaraciones, de modo que se sientan menos acusatorias para la otra persona. Aquí hay algunos ejemplos de cómo lidiar con personas tóxicas bajo este parámetro:

  • “Me siento incómodo cuando escucho cosas desagradables sobre nuestros compañeros de trabajo. No participaré en estas conversaciones”.

  • “Valoro la confianza en la amistad, así que no puedo continuar con esta amistad si me mientes de nuevo”.

6. Hazles saber que no estás disponible

Las personas tóxicas a menudo saben a quién pueden manipular y cómo hacerlo. Sin embargo, pueden marcharse cuando ven que sus tácticas no funcionan contigo.

Si nunca estás disponible, es posible que eventualmente dejen de intentar interactuar contigo. Esta estrategia puede ser particularmente útil en el trabajo, donde seguramente tendrás muchas excusas verdaderas, como:

  • "Lo siento, tengo demasiado trabajo para charlar".

  • “Tengo que prepararme para una reunión, así que no puedo hablar”.

Es posible que recibas algunos comentarios pasivo-agresivos o acusaciones directas cuando evites a estas personas tóxicas. Trata de no responder, incluso si te sientes incómodo. Recuerda que no se trata de ti.

7. Aléjate

Cuanto todo lo que intentes fracase, incluso los consejos que acabamos de darte, entonces deberás entender lo insostenible que puede ser la relación con esa persona tóxica.

Si sientes que afecta y daña seriamente tu bienestar emocional, debes considerar tomar distancia de esa persona. Porque no solo estará en juego tu salud mental y emocional, sino también tu autoestima.

evitar personas tóxicasFuente: Unsplash

Como te diste cuenta, las personas tóxicas existen, es una realidad ineludible. Sea un familiar de toda la vida, un amigo de la universidad o una pareja con la que empezaste a salir recientemente. Si sientes que algunas de las conductas que hemos mencionado se encuentran replicadas en esa persona en particular, lo mejor es que optes por la vía rápida y, si puedes separarte de esa persona fácilmente, entonces no lo dudes.

El tema está en que no puedes permitir que una persona tóxica lastime tu bienestar emocional, ya que eso es darle un poder que no merece. Su conducta en ningún caso es tu culpa, por lo que no tienes que soportar una situación que se va a volver insufrible con el tiempo.

¿Has frecuentado con personas tóxicas últimamente? Debes optar por la solución más sencilla y, también la más difícil: buscar tu camino en otra parte. Porque la mejor manera de evolucionar es estar libre de influencias negativas en tu vida. Si quieres crecer como persona y profesionalmente, dale un vistazo a nuestros cursos online de desarrollo personal con los cuales podrás lidiar con todo lo que te propongas. ¡Éxitos!