Tu mente es el punto de inicio de lo que dices, haces y expresas; de aquellas sensaciones que salen cuando estás probando tu postre favorito; y por supuesto, de absolutamente todos los afectos.
Mira tus manos un segundo y llévalas cruzadas detrás de tus hombros. Este es un primer abrazo del día. ¿Qué te hace sentir?
Un mimo, un abrazo, una mirada al interior. Estos son caminos seguros, sobre todo en una semana como esta, en la que compartirás mucho espacio contigo mismo.
Revisarte, con los lentes puestos, es un afecto con resultados poderosos para tu confianza.
Pero no es tan fácil hacerlo si nunca nos hemos dado la oportunidad de empezar. Por eso iremos paso a paso, revisemos algunos puntos esenciales que determinan tu confianza. Para hacerlo, si te sientes cómodo coloca tus manos o dedos en forma de un triángulo.
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1. La parte de arriba es tu centro, representa aprender siempre y perderle temor al fracaso
¿Lo que escuchas aumenta tu confianza física o intelectual? ¿En qué momentos sientes que no? Cuando tenemos tanta información alrededor, existe también la oportunidad de elegir qué tomar para nuestra mente y qué no, ¡y tú tienes el control remoto! Como diría mi madre, si ese programa de televisión no te nutre, cambia de canal.
Toda esta información va a darte mayor seguridad cuando elabores oraciones, textos o frases para ti mismo. Además, vas a despertar tu lado investigador, escuchando o leyendo a otros. Verás cómo cuando la duda aparezca, también aparecerán cientos de oportunidades de mostrar que tienes la información que se necesita.
En pocas palabras, toma la información a favor de tu interior. ¿Qué quieres aprender y qué es lo mejor para ti?
No hay lado negativo en el aprendizaje, inclusive podemos aprender del fracaso y el error. Aquel escrito no tiene que ser perfecto ni aquella presentación que hiciste en remoto con tus coworkers. Tú tienes la misión de hacerlo lo mejor posible y desde ahí debe partir tu confianza. ¡Sí!, con una fracción de posibilidad para el error.
¡Lo estás haciendo lo mejor que puedes, conserva la misma energía para hacerlo mejor más tarde!
Los borradores serán aliados para una constante mejora. ¿Se te viene a la mente la versión final.final.final? ¿Que tal si solo es la versión y punto? Si apuntas a siempre hacerlo mejor que antes estarás abierto a no solo hacer modificaciones sino también a aceptar cuando algo no sale tan bien como lo tenías planeado.
2. Vayamos a los lados, la base donde el ego y el realismo se miran entre sí
El ego en extremo no es saludable, lo que sucede cuando solo piensas en ti sobre todo en el trabajo, es que dejarás de estar presente; y abandonarás, la escucha o la empatía por el resto. Te desconectaras de lo que estás viviendo.
Lo que queremos en este caso, es mirar al ego desde su espacio positivo: mirando tu “yo” como valioso sin alejarte de lo que te enseña el resto.
Al frente del ego, encontrarás la realidad, este será el espacio para abordar todos esos aspectos que sabes que tienes, y no solo tus cualidades. ¿Cómo se comporta la realidad con tu ego? ¿Alguna vez miraste para tus defectos? Esta es una oportunidad para ver ambos lados, la realidad son todos los aspectos que te rodean y puede contrastarlos..
¿Qué harás mañana en tu trabajo remoto? Te propongo elegir un proyecto o tarea y colocarla encima de tu triángulo.
- Arriba: ¿Cómo lo harás lo mejor posible? ¿Este es el inicio o ya hubo un proceso anterior?
- Abajo: ¿Cómo puedes hacer para trabajarlo en equipo? ¿Qué cualidades que tengo mostraré en este proyecto? ¿En qué puntos de mi trabajaré para sacarlo adelante?
Tú y tu trabajo son valiosos, ahora puedes darle una mirada interior, reconocerte y por supuesto potenciarte. ¿Manos a la obra? Si quieres probar otras herramientas que tenemos para ti y tu productividad laboral, en nuestro panel de recursos tenemos muchos contenidos para ti.