Home Blog/ Transformación cultural/
Transformación cultural

El modelo de negocio de las empresas tipo B implica una visión de protección medioambiental y cuidado sostenible. Al mismo tiempo, una empresa tipo B incluye una cultura organizacional determinada por un propósito que está atravesado por la sostenibilidad, la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y la transparencia en relación con sus procesos y la gestión ambiental. Estos valores se suelen transmitir en cada uno de los procesos que se llevan a cabo independientemente del sector de la compañía del que se trate. 

Desde un enfoque técnico, para que las empresas tipo B puedan ser consideradas como tales, es imprescindible que se efectúe un proceso de certificación, que involucra cumplir con una serie de pasos indispensables. Pero más allá de los requisitos a contemplar para formar parte de este conglomerado de empresas tipo B, el factor diferenciador está determinado por una cultura corporativa basada en el cuidado ambiental y en la búsqueda de una constante contribución con el medioambiente. Sigue leyendo esta guía sobre la importancia de las empresas tipo B en el contexto empresarial actual y aprende de qué modo se puede potenciar el bienestar del talento humano y alcanzar los objetivos organizacionales con éxito a través de una cultura similar.

 

¿Qué son las empresas tipo B?

Las empresas tipo B toman dicha denominación por cumplir con una certificación organizacional, centrada en la búsqueda de la sostenibilidad empresarial y de un impacto positivo en el medioambiente. Históricamente, el sistema B nació como una idea de B Lab, una empresa que surgió en el año 2006 y fue fundada por Jay Coen Gilbert. Este se encargó de darle forma a las empresas tipo B y de organizar una comunidad, basada en valores empresariales como el cuidado y la sostenibilidad ambiental. A continuación te mencionamos algunas de las características de las empresas tipo B, que constituyen el impacto de esta clase de organizaciones:

  • Poseen un propósito de cuidado ambiental: los ejemplos de empresas tipo B son entidades que buscan la protección del medio ambiente o tienen un objetivo que afecta positivamente el entorno social. 

  • Se diferencian por la RSE: de hecho, aprovechan el poder del mercado para obtener productividad, pero al mismo tiempo le dan un valor agregado al contexto. Ello, por medio de una colaboración social o mediante el cuidado medioambiental; y a partir de una perspectiva sustentable. 

  • Tienen un alto nivel de transparencia: este tipo de compañías tiene una serie de políticas medioambientales bien definidas, sostenidas en los principios de compromiso y transparencia, en el interior y exterior de la organización. De este modo, en una empresa B, se busca generar relaciones comerciales desde la autenticidad y los buenos valores, en relación con el trato con los clientes, proveedores, recursos humanos, etc. Se debe tener en cuenta que la transparencia de las empresas tipo B es certificada por una institución externa, que garantiza el cumplimiento de ciertos lineamientos de carácter social y sustentable.

 

¿Cuáles son las pautas para conseguir la certificación de empresas tipo B?

En relación con los pasos a seguir para ser una empresa tipo B certificada, es importante reconocerlos para aquellas compañías que estén interesadas en convertirse en esta clase de organizaciones. Recuerda que dicha certificación la emite la empresa B Lab y es necesario revisar las condiciones específicas para las empresas tipo B a partir del marco regulatorio de cada país. En esta sección, detallamos de manera general las instancias que se deben contemplar para lograrlo:

  • Evaluación de impacto B: para ser una de las empresas tipo B, deberás rellenar un formulario gratuito y confidencial, que servirá para la medición de la incidencia que posee la organización en el entorno. 

  • Cuestionario de Divulgación e Industrias Controversiales: es obligatorio establecer si existe algún antecedente de la empresa con sectores industriales que perjudican el medioambiente o la sociedad de manera particular.

  • Instancia de revisión: las potenciales empresas tipo B podrán avanzar en el proceso de certificación exclusivamente si han obtenido menos de 80 puntos totales en el análisis de impacto social. 

  • Elegibilidad inicial: esta fase de la certificación de las empresas tipo B es un estadío previo a la aceptación definitiva de la compañía en la comunidad B. Esta dependerá de adjuntar y aceptar la documentación extra, junto con un pago inicial y la firma de un conjunto de términos y condiciones legales.

  • Verificación y pago anual: una vez que se hayan evaluado los formularios, el puntaje y la documentación, se procederá con el pago de la cuota anual según cada país. Esto, teniendo en cuenta el total facturado por la empresa.

 

¿Cuáles son los beneficios de las empresas tipo B?

Muchos son los aspectos positivos vinculados con las empresas tipo B. Se puede destacar el mejoramiento del branding corporativo, la credibilidad como compañía, la optimización de la cultura organizacional, la búsqueda del bienestar común, etc. Por otro lado, desde un enfoque corporativo, los resultados económicos en las empresas tipo B son esenciales como en cualquier compañía. No obstante, estos deben lograrse sin perder de vista el cuidado del medioambiente y la promoción de una educación ambiental que parta del interior de las organizaciones hacia el exterior. 

Para que conozcas en mayor profundidad cuáles son los beneficios de ser una empresa tipo B y cómo pueden servir de ejemplo de una cultura organizacional positiva para el resto de las compañías, aquí te mencionamos los más relevantes:

  • Fortalecimiento de la credibilidad de la compañía: la preocupación por la sostenibilidad ambiental genera que aquellas personas que no conozcan la compañía incorporen una visión positiva de sus valores, junto con la misión y la personalidad de la marca en su conjunto. Esto es relevante para desarrollar una marca empleadora que se diferencia de la competencia y que pueda ser incluso una referencia dentro del ámbito empresarial, como una compañía que promueve sus productos o servicios, pero sin perder de vista el papel central de la sustentabilidad. 

  • Optimización de la experiencia del colaborador desde el comienzo del proceso de selección: las empresas tipo B aprovechan su cultura para comunicarla desde las primeras fases de los procesos de búsqueda de talento humano. Aún cuando los potenciales candidatos no han tenido un contacto real con la empresa tipo B, desde las redes sociales y a través de distintos medios digitales, se enfatiza en la importancia del cuidado sostenible para informar sobre la misión de la compañía. De este modo, se potencia el nivel de encaje con el postulante ideal. 

  • Mejoramiento de la posición que las empresas tipo B tienen en el mercado: el cuidado medioambiental y contemplar el nivel de incidencia de los procesos industriales y empresariales en el entorno es una de las tendencias esenciales hoy en día. Por eso, una compañía tipo B que priorice la protección medioambiental por sobre el alcance del mayor rendimiento económico sin tener en cuenta las consecuencias en el entorno, no estará bien catalogada en el mercado.

  • Las empresas tipo B suelen interesarse por el bienestar de las personas además de la sostenibilidad ambiental: por lo general, la visión de una compañía tipo B sobre la sustentabilidad también se extiende al resto de la cultura organizacional. De esta manera, las empresas tipo B disponen de mecanismos estratégicos que se basan en la búsqueda del mayor nivel de salud de las personas que integran los equipos de trabajo. De acuerdo con nuestro podcast Impacta en el negocio a través de la cultura con Juan Muldoon de Grupo Bimbo, se debe fomentar un ambiente de trabajo en el que se priorice el bienestar de las personas. Efectivamente, una compañía es una invención humana que se ha creado para servir al talento humano en función de las necesidades de las personas que se requieran satisfacer.

¿Cómo potenciar los resultados de los equipos a través de la cultura de empresas tipo B?

Este tipo de organizaciones puede ser un ejemplo a seguir en relación con la forma de optimizar la productividad, a partir de una cultura corporativa sostenible y basada en el bienestar de las personas consigo mismas, con sus compañeros de trabajo y con su entorno. Como afirma un artículo de Harvard Deusto, la forma en la que se gestiona la cultura de una compañía puede incidir positiva o negativamente en el desarrollo estratégico de un negocio. En esta sección, te enumeramos y describimos brevemente cuáles son los mejores métodos para optimizar la cultura corporativa a partir del marco propio de las empresas tipo B:

a. Ofrecer viandas saludables para mejorar el salario emocional

Una de las formas más eficientes para maximizar el rendimiento de los equipos de trabajo a través del desarrollo de algunos aspectos propios de la cultura de las empresas tipo B está vinculada con el salario emocional y la alimentación sustentable del talento humano. De acuerdo con nuestra Guía sobre emprendimiento sostenible: creando marcas que aportan al medio ambiente, existen distintos mecanismos para fortalecer una cultura organizacional basada en los lineamientos de las empresas tipo B. Por ejemplo, se pueden incorporar alimentos orgánicos dentro de las posibilidades de las viandas saludables para aquellos equipos que trabajan bajo la modalidad híbrida o presencial que cumplan con los parámetros propios del cuidado medioambiental. Como consecuencia, se podrá optimizar el engagement por parte de los colaboradores, incrementar el sentido de pertenencia y potenciar el desempeño y el alcance de los objetivos propuestos.

Guía sobre emprendimiento sostenible: creando marcas que aportan al medio ambiente

“Guía sobre emprendimiento sostenible: creando marcas que aportan al medio ambiente”, Crehana

b. Ejecutar cambios organizacionales desde una perspectiva cultural

Por otro lado, el modelo de las empresas tipo B puede ser un paradigma a seguir por otro tipo de compañías que busquen aumentar el rendimiento a través de la comunicación de valores basados en el cuidado medioambiental y el bienestar integral de las personas. Para aumentar la productividad laboral desde esta premisa, es necesario promover un proceso de transformación cultural, en el que existan estrategias para que los HR Managers desarrollen el talento. Esto es posible si se contemplan una serie de recomendaciones que a continuación se mencionan:

  • Hacer un relevamiento de los indicadores de cambio organizacional para corroborar si es viable la puesta en acción de modificaciones de las empresas tipo B y conocer con el mayor nivel de exactitud posible cómo sería la respuesta de los grupos de trabajo. Es importante que se obtengan datos cuantitativos y cualitativos para que la toma de decisiones relacionada sea la más acertada.

  • Utilizar interfaces digitales que permitan recolectar la información de carácter cuantitativo de la forma más ágil y efectiva. Esto con el objetivo de reducir las tareas manuales por medio de la automatización. Entre las opciones más apropiadas, se destaca el  software de clima laboral de Crehana que permite a los líderes de equipos diseñar distintas clases de encuestas a partir de variables prefijadas por el usuario. Al mismo tiempo, ofrece la posibilidad de establecer programas de reconocimiento para potenciar el rendimiento de los colaboradores desde la motivación.

Plataforma de desempeño de Crehana

Plataforma de desempeño de Crehana

  • Brindar capacitaciones profesionales a cada uno de los integrantes de los equipos de trabajo de las grandes compañías que necesitan adecuar su cultura corporativa en función de los valores y metas de las empresas tipo B. Así, según las necesidades de horarios, las preferencias del talento humano y los requerimientos propios de la modalidad de trabajo de la compañía, se pueden planificar y ejecutar instancias formativas presenciales, remotas o híbridas.
    Dentro de este contexto, el empleo de recursos digitales de e-learning basados en el entretenimiento y en la Inteligencia Artificial (IA), es ideal. Aquí se puede hacer referencia a la alternativa de ofrecer una experiencia de aprendizaje diferente sustentada en los procesos de gamificación individuales y grupales, presenciales o virtuales. Por ejemplo, los líderes de trabajo pueden utilizar el software de desarrollo de Crehana que promueve la educación y la transformación cultural de las personas de una forma lúdica y entretenida.

Plataforma de desarrollo de Crehana

Plataforma de desarrollo de Crehana

c. Verificar la respuesta de tus equipos de trabajo a los cambios implementados

Por último, se vuelve imprescindible constatar la forma en la que las modificaciones se hayan implementado en la cultura organizacional de la compañía según los valores propios y los objetivos de las empresas tipo B. En cuanto a esto, también se pueden aprovechar las ventajas de las nuevas tecnologías y de las interfaces digitales que permitan optimizar la recolección de los datos y la obtención de las métricas. Asimismo, facilitan la evaluación de las competencias requeridas desde el departamento de talento y en función de los lineamientos del mánager. 

Una de las herramientas más útiles para lograr una adecuada medición de la implementación de las modificaciones culturales en aquellas empresas que desean asemejar sus valores y metas a los de las empresas tipo B es el software de desempeño de Crehana. A través de su utilización, el líder de equipo tendrá la posibilidad de fortalecer la retroalimentación comunicacional y conocer a través de datos certeros y de información cualitativa cuáles han sido los resultados en relación con el proceso de adaptación de la cultura organizacional a la visión que proponen las empresas tipo B para aumentar el rendimiento empresarial.

Plataforma de clima laboral de Crehana

Plataforma de clima laboral de Crehana

En resumen, las empresas tipo B en el mundo son modelos de organizaciones a seguir, por su alto compromiso con el cuidado del medioambiente y el deseo de alcanzar la productividad, pero sin perder de vista la sostenibilidad. De esta manera, una empresa tipo B se diferencia por una cultura corporativa basada en la búsqueda del bienestar común dentro de los equipos. A la vez, este paradigma de relacionamiento positivo se ve reflejado también en el contacto que las grandes compañías tipo B tienen con el entorno. 

Para que las ventajas de las empresas tipo B puedan alcanzarse, es necesario que los líderes de equipo crean y transmitan los mismos valores corporativos enlazados con el cuidado sostenible y la importancia de una actividad basada en los principios inherentes a la RSE. Dentro de este contexto, cobra vital relevancia el aprovechamiento de los recursos digitales como herramientas que potencien la comunicación, la evaluación del clima de trabajo en los mejores ejemplos de las empresas tipo B y la optimización del bienestar. Todo por medio de métricas cuantitativas confiables que optimicen la toma de decisiones asociada con estos procesos. 

Por eso, conocer las empresas tipo B es necesario para todas las compañías de gran dimensión que desean potenciar los resultados económicos, a través del fortalecimiento de su cultura organizacional, independientemente de que esté orientada o no al desarrollo y cuidado sostenible.