Cuando se trata de tomar buenas fotos para comida hay una sola cosa que tienes que tener en mente: que cuando las personas vean la imagen saliven y mueran por comer lo que es están viendo. Así es como sabes que has logrado tomar una buena foto: quieres lamer la pantalla del dispositivo donde la estás viendo.
Si quieres enloquecer a tus amigos en Instagram o te encantaría convertirte en un profesional y tomar las fotos más increíbles. Los siguientes tips pueden ser de gran ayuda.
Recrea una foto
Seguramente has visto muchísimas fotos increíbles, pues esta es tu oportunidad. Elige una e intenta recrearla. Ve a la cocina, prepara lo que necesites, acomoda tu set y manos a la obra. Presta atención al estilo de la comida, la luz, el ángulo en el que fue tomada la foto y la profundidad de campo. Probablemente vaya a ser mucho más difícil de lo que parece, pero vale la pena intentarlo como ejercicio.
Adquiere un libro
Existen muchos libros que además de mostrarte fotos de comida increíbles, también pueden darte algunos consejos sobre cómo hacerlo para lograr resultados sorprendentes. Algunos buenos títulos son, From Plate to Pixel de Helene Dujardin, The Food Photography Book de Nagi Maehashi.
Practica todo el tiempo
Toma muchas fotos desde todos los ángulos. Muévete alrededor de la comida, toma fotos desde arriba y desde abajo; de cerca y de lejos. Juega con la configuración de tu cámara, cámbiala. Recuerda que siempre puedes eliminar las fotos que no salen bien, así que no escatimes esfuerzos y toma muchísimas.
Sube tus fotos a sitios especializados
Si quieres darle una mayor exposición a tu trabajo puedes subir tus fotos a Foodgawker y Tastespotting, pero recuerda que tendrás que recortar tus fotos en cuadrado. Ten esto en mente cuando estés haciendo tus capturas.
Cuida la iluminación
Nunca utilices el flash de tu cámara. Esto es verdadero prácticamente para todas las situaciones, pero especialmente si hablamos de comida. Puedes utilizar alguna luz aparte que te funcione bien, alguna con color neutral y que puedas direccionar fácilmente para cambiar la intensidad de la luz. Pero si todavía no te sientes listo para dar este paso, asegúrate de tomar fotos durante el día junto a una ventana. Si recibes mucha luz solar directa puedes cubrir la ventana con una sábana blanca para que la luz se difumine y no sea tan dura.
Recrea algunas escenografías
Para imprimir a las fotos tu propia personalidad, puedes elegir algunos elementos o accesorios con los que te guste trabajar. Pueden ser algunas toallas de papel o de pergamino y cubiertos, por mencionar algunos.
Crea nuevas propuestas
Una buena idea es estar en la búsqueda de nuevas propuestas. Algunas de las más interesantes puedes encontrarlas en periódico, postales antiguas y utensilios de cocina que tengan formas interesantes.
Elige elementos sencillos de usar
Fotografía comida con la que sea fácil trabajar, piensa en colores brillantes y mucha textura. Probablemente los platillos con los que es más difícil de trabajar son los que tienen poco color o son muy blancos. Si comienzas con un tema fácil eso te ayudará a ganar más confianza y querrás tomar más fotos.
Disfruta
Estás tomando fotografías de comida bella y deliciosa, no hay nada mejor que hacer. ¡Disfruta! Haz que convertirte en un mejor fotógrafo sea un viaje interesante y divertido. Continúa aprendiendo y disfruta del proceso.
Si quieres aprender de la mano de un conocedor, no te pierdas este curso