Home Blog/ Transformación digital/
Transformación digital

¿Te gustan los colibríes? Esta pregunta random en un artículo sobre SEO tiene una explicación. Luego de la llegada de  Google Hummingbird (o Colibrí) en 2013, el SEO semántico comenzó a tener una relevancia impresionante.

Cada actualización del algoritmo de Google agrega una tarea más al checklist de optimización para motores de búsqueda. Pero entre términos más “pomposos” como SEO On Page y SEO técnico, el SEO semántico parece el patito feo. ¡Solo se engañan quienes piensan así!

Si el propósito de Google es dar respuestas cada vez más precisas ante la búsqueda de los usuarios, necesita entender cuál es el significado, contexto e intención de un usuario que, por ejemplo, escribe “pies bonitos”. ¿Quiere aprender consejos para el cuidado de los pies, o quiere ver fotos de pies bonitos? 🤷‍♀️🤷‍♂️

En esta nota vamos a revisar todo lo que necesitas saber sobre SEO semántico: búsqueda semántica, intención de búsqueda, técnicas de SEO semántico y todos esos aspectos que te ayudarán a conquistar las primeras posiciones de la SERP. ¿Comenzamos? 

¿Qué es SEO semántico?

El SEO semántico es aquel que trabaja en optimizar los aspectos lingüísticos de una página o sitio web, es decir, se encarga de hacer que Google —o cualquier motor de búsqueda— interprete las expresiones y entienda la relación que existe entre las palabras.

Y es que si lo piensas bien, el trabajo que requiere que un robot entienda qué es lo que quieres buscar es monumental, sobre todo cuando usamos un lenguaje cada vez más natural. ¡Mira nada más este ejemplo donde Google interpreta el campo semántico de palabras que ni existen!

Ejemplo SEO semántico

Fuente: SERP de Google.

Tenemos que agradecerle a Hummingbird que hoy Google sea esa plataforma humana que entiende búsquedas lingüísticamente complejas, que predice lo que queremos buscar y que ha dado a los analistas SEO más estrategias para posicionar sus sitios web en las intenciones de búsqueda correctas. Todo esto gracias a la búsqueda semántica.

Además del cambio de algoritmo de Google, otro gran promotor del SEO semántico son las cada vez más populares búsquedas por voz. Le preguntamos a Siri, Cortana y Alexa de forma tan coloquial como hablamos con nuestros amigos. A propósito, ¿sabías que el 65% de los consumidores de entre 25 y 49 años hablan a diario con sus dispositivos habilitados para voz?

En definitiva, aprender SEO semántico implica defender la máxima de la creación de contenidos con buenas prácticas SEO:

👉 Escribir para los humanos, no solo para los buscadores. ¿Y cómo funcionan los buscadores? Dale play al siguiente video.

 

 

¿Cómo se diferencia el SEO semántico del SEO técnico?

Hemos hablado que las formas de buscar están cambiando. Por eso, de una web tradicional basada en una estructura de documentos enlazados entre sí se está pasando hacia una web semántica.

Según SEMrush, la web semántica, o web 3.0, no se basa en documentos, sino en entidades de información y su relación entre ellas. De esta manera, los motores de búsqueda son capaces de resolver consultas con términos polisémicos, sinónimos, plurales, etc.

Según Andrés Leguizamón, líder SEO en El Espectador y profesor del curso online de SEO para redactores, el SEO semántico no solo se preocupa por las palabras clave, sino también por las entidades:

“Para Google una entidad puede ser cualquier cosa: un objeto, un nombre, una persona, incluso una idea (...). Debemos entender que una palabra clave puede tener una o varias entidades relacionadas. Identificar estas entidades y usarlas en tu texto te ayudará no solo a posicionarte más fácil, sino a incrementar el alcance de tu nota”.

En el curso, Leguizamón nos da el ejemplo de la palabra clave “Selección Colombia”. En los primeros resultados aparecen noticias sobre la entidad “Radamel Falcao”. Así pues, aunque no estamos buscando a Falcao como tal, Google relaciona la palabra clave “Selección Colombia” con la entidad “Radamel Falcao”.

En resumen, el SEO técnico se queda trabajando en la web tradicional, mientras que el SEO semántico se enfoca en la web 3.0, es decir, en optimizar la estructura semántica de las entidades de información.

Este kit de herramientas SEO te ayudará a optimizar tus páginas web. ¡Descárgalo gratis!

Banner Kit herramientas SEO Crehana

 

¿Para qué sirve el SEO semántico?

Dijimos que el objetivo de Google es ofrecer a los usuarios los resultados más relevantes para sus consultas, ¿verdad? Para eso, la búsqueda semántica se está volviendo el proceso más usado para mejorar la consulta en Internet. 

El SEO semántico tiene muchas funcionalidades.

Muestra relaciones entre palabras clave y entidades. En este ejemplo de búsqueda semántica preguntamos “Quién es el dueño de Microsoft”. Google realizó las conexiones semánticas entre todas las páginas de su índice y, automáticamente, nos arroja dos entidades: Bill Gates y Paul Allen.

Ejemplo entidades informáticas

Fuente: SERP de Google.

✅ También puede incorporar sugerencias de búsqueda y búsquedas relacionadas que facilitan la investigación de los usuarios según el campo semántico de la consulta.

Ejemplo sugerencias de búsqueda

Fuente: SERP de Google.

Puede mostrar Knowledge Graphs, una herramienta que hace que los usuarios reciban respuestas rápidas directamente en la SERP. Todo esto gracias al SEO semántico.

Ejemplo knowledge graph

Fuente: SERP de Google.

Según SEMrush, lo que se tiene en cuenta en la búsqueda semántica es la red semántica de las palabras clave y el significado de la consulta que se realiza, es decir: su contexto y su intencionalidad. ¡Veámoslo con detalle! 👇

 

Contexto en el SEO semántico

El contexto es todo lo que rodea a la búsqueda y es particular para cada usuario. Por ejemplo, toma en cuenta el historial de búsqueda, la geolocalización, el SEO local, el idioma, la fecha y la hora, etc.

 

Intención de búsqueda en el SEO semántico

De acuerdo con Ahrefs, la intención de búsqueda es el “¿por qué?” detrás de una consulta. Es decir, es lo que le muestra a Google la razón por la que un usuario realizó determinada búsqueda.

👉 Te ponemos un ejemplo de SEO semántico. Imagina que estás con un fuerte dolor de cabeza hace un par de días. Antes de consultar con un médico —que es lo que deberías hacer 😅—, lo primero que haces es sacar tu teléfono del bolsillo y escribir en Google: “tengo dolor de cabeza”.

Ahora bien, tú sabes que quieres conocer más sobre el problema, pero Google puede entender que quieres llamar al 911 para que vengan a tu rescate. La pregunta es: ¿cómo entiende Google qué es lo que quieres? ¡Exacto, con la intención de búsqueda!

Tu consulta “tengo dolor de cabeza” puede responder a 4 tipos de intención de búsqueda:

  • Búsqueda informativa: arroja resultados que sirven para ampliar el conocimiento sobre un tema. Pueden ser artículos de blog —como este que estás leyendo—, videos, imágenes, noticias, etc. 

 

  • Búsqueda de navegación: los usuarios quieren llegar a un sitio web en concreto, por lo que los resultados de la búsqueda suelen ser landing pages, páginas de inicio o perfiles de redes sociales.

 

  • Búsqueda transaccional: los usuarios quieren comprar productos y servicios específicos. Por eso, los resultados son fichas de productos de  una tienda online o páginas de productos y servicios.

 

  • Búsqueda de investigación comercial: ayudan al usuario a valorar sus opciones antes de tomar una decisión final sobre la compra. Los resultados son páginas de análisis, reviews y comparativas.

 

Hicimos el ejercicio y los resultados de búsqueda de la palabra clave “tengo dolor de cabeza” arroja contenidos educativos. Estamos ante una palabra clave con intención de búsqueda informativa. ¡Ta daaaa!

Ejemplo Tengo dolor de cabeza

Fuente: SERP de Google.

💡 Pro tip: Para ampliar tu conocimiento, te dejamos esta tabla de Ahrefs donde encuentras algunos “modificadores” de palabras clave que indican el tipo de intención de búsqueda.

Tabla modificadores intención de búsqueda

Fuente: Ahrefs.

Para eso sirve el SEO semántico: para que Google dé las respuestas más relevantes ante la búsqueda de los usuarios, teniendo en intenciones y contextos. 🎯

Técnicas de SEO semántico

Con todo lo robótico que Google pueda ser, bien se puede hacer pasar por una persona que sabe leer e interpretar el significado y la relación de las palabras. ¡Los analistas SEO pueden utilizar esto a su favor para mejorar su posicionamiento orgánico! Presta atención a las siguientes técnicas de SEO semántico. 

👉 Por cierto, para que todo sea más fácil de entender, usaremos un nuevo ejemplo de SEO semántico. Supondremos que tienes un e-commerce que vende materiales de arte y dibujo. Veamos cómo optimizarlo con SEO semántico. 

 

Comprueba la intención de búsqueda de tus palabras claves en la SERP

Correr la búsqueda de una palabra clave y revisar los resultados que aparecen en la SERP nos da una buena idea sobre la intención de búsqueda de dicha palabra clave. 

Tomemos como ejemplo la palabra clave “aprender a dibujar”. Es una palabra clave genérica que, aunque no tiene directa relación con los productos del e-commerce, nos puede ayudar a incrementar el tráfico orgánico. ¿Cuál será su tipo de intención de búsqueda?

Ejemplo aprender a dibujar

Fuente: SERP de Google.

Por el tipo de resultados que tenemos en esta SERP, podemos deducir que estamos ante una palabra clave de búsqueda informativa. Además, analizando el tipo y formato de contenidos de los primeros resultados, vemos que hacer un blog post queda como anillo al dedo.

❎ Antes de seguir, ¡no olvides que los resultados de Google cambian con el tiempo! Lo que hoy es una palabra clave informativa, mañana puede ser transaccional. Tenlo en cuenta al momento de hacer SEO semántico.

 

Crea tu contenido incluyendo términos que favorezcan la desambiguación lingüística

Ya sabemos que vamos a crear un blog post optimizado para la palabra clave “aprender a dibujar”. Sin embargo, no quieres incluir solo esta palabra clave principal en tu contenido, sino que quieres complementar con muchas entidades para construir el campo semántico. 

  • En términos prácticos de SEO semántico, las entidades son palabras secundarias que incluyen no solo sinónimos, sino otros términos relacionados. 

 

Incluir estas palabras como una optimización de SEO semántico no solo favorece la  indexación de tu web y su posicionamiento en términos similares a los de tu palabra clave principal, sino que también le ayuda a Google a contextualizar el contenido. Esto se conoce como desambiguación lingüística o implícita.

👉 La desambiguación lingüística se trata de centrarse en una palabra clave y dejarle claro a Google que tu contenido pertenece a determinado universo temático al asociar múltiples entidades. Esta técnica de SEO semántico es muy útil en palabras polisémicas. 

Por ejemplo, si hablamos de "salsa", otras entidades (o palabras secundarias) que puedes agregar en tu contenido son “música”, “baile” o “instrumentos”. Así, creas el campo semántico que deja claro que estamos hablando del género musical y no del aderezo de comida.

En el caso que estamos estudiando, la palabra clave principal “aprender a dibujar” no tiene polisemia. Así que buscaremos palabras clave secundarias que toquen temas sobre los que tu público esté hablando y completen el campo semántico. Por ejemplo: 

  • Aprender a dibujar para principiantes
  • Aprender a dibujar para niños
  • Ejercicios para aprender a dibujar

 

¿Cómo encontrar palabras clave secundarias para SEO semántico?

  • Utiliza las preguntas de la caja “Preguntas frecuentes” o “People also ask”.
  • Usa el autocompletado de Google.
  • Revisa la caja de “Términos relacionados”.

 

Organiza las ideas para tu blog con esta plantilla de Calendario Editorial en Excel

Banner Plantilla Calendario Editorial

 

Crea un linkbuilding semántico

Para hacer linkbuilding con SEO semántico debes optimizar los anchor text para facilitarle a Google la tarea de interpretar el significado del contenido al que enlazas. Se trata de ponerles términos que hagan referencia a la entidad de información enlazada.

Por ejemplo, algunos buenos anchor text para hacer linkbuilding en nuestro artículo de “aprender a dibujar” son:

  • Tipos de pinceles
  • Tipos de lápices
  • Cómo dibujar paisajes

 

Estos términos nos ayudan a ampliar y completar el campo semántico de nuestro contenido.

Marcado de datos estructurados

Por último, aquí es donde el SEO semántico se une con su primo popular, el SEO técnico. Los datos estructurados son códigos en HTML con los que puedes marcar algunos elementos de tu página web para que Google pueda entenderlos. 

De esta manera le muestras a Google sobre qué es tu página y le ayudas a catalogar el contenido de la misma, evitando ambigüedades. En búsqueda semántica, esto se conoce como desambiguación directa o explícita. 

Además, la ventaja es que cuando Google sabe interpretar los datos de tu página, puede presentarlos de formas nuevas y más atractivas en la SERP como:

  • Featured snippets
  • Rich snippets
  • Anuncios de Google Ads
  • Preguntas relacionadas
  • Resultados en video

 

Mira la siguiente imagen de este estudio de Ahrefs y verás cómo el featured snippet “roba” clics de la página en la primera posición. ¡Qué caramelito para los SEO manager!

Tasa de clics Featured Snippet

Fuente: Ahrefs.

💡 Pro tip: Usar el Asistente para marcado de datos estructurados de Google para configurarlos.

Hemos llegado al final. Como ves, el SEO semántico representa el futuro de los buscadores y, en poco tiempo, será el nuevo rockstar del marketing digital como el SEO técnico, el SEO On Page, Off Page y Local. 

¡No te quedes atrás! Profesional de marketing preparado vale por dos y en Crehana encuentras cursos de SEO actualizados que te ayudarán a alcanzar la cima de las posiciones de Google.